Derrame

Según el economista Nicolás Cachanovsky, la denominada “teoría del derrame” económico no existe.

¿Y el derrame político? Si, es la nueva teoría que practican los líderes de Cambiemos.

Nacionalizan la campaña compitiendo con Cristina Kirchner, bajan sus referentes formados en la ciudad de Buenos Aires a hacer política en las provincias donde nacieron y “derraman” la ola amarilla sobre todo el país.

Allí está el “colo” Mac Allister , con Martín Maqueira, derrotando al gobernador Carlos Verna; el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, junto al radical Atilio Benedetti en Entre Ríos ; el diputado Eduardo Laspina bajó a Santa Fe, para pelear con Agustín Rossi ; Mauricio Macri con Baldassi en Córdoba, y siguen las firmas.

A falta - aún - de una “economía electoral”, Cambiemos se las arregla con el “derrame político” de sus promesas.