Supermercadistas chinos sufrieron dos brutales asaltos en menos de un mes

En apenas 20 días, un matrimonio de supermercadistas chinos que trabaja en inmediaciones de la Estación de Trenes padeció dos violentos asaltos en su vivienda, por lo cual resolvieron, en las últimas horas, continuar con su local pero mudarse de su casa en la misma zona.

Es que los ataques no sólo les dejaron golpes físicos y económicos: les marcó a fuego el miedo a que la historia sume un nuevo capítulo igual de violento.

Detrás del mostrador de su negocio de diagonal 80 y 43, Lin Guohijo, de 57 años y nacionalidad china, contó a este diario los detalles del último atraco. Dijo que fue a las 21.40 del jueves, cuando su esposa y su hija adelantaron su regreso al domicilio que comparten a la vuelta del supermercado, mientras él se quedó un rato más para cerrar.

Esa circunstancia fue aprovechada por una banda de delincuentes que, al parecer, conocía a la perfección los movimientos de la familia y los esperó con un auto estacionado frente a la casa de que los damnificados alquilan desde hace algunos años en 43 entre 115 y 116.

Hasta allí llegaron ambas mujeres, siendo inmediatamente sorprendidas y reducidas con armas largas. De este modo las obligaron a franquerles el acceso a la propiedad, dando arranque a una violenta entradera.

Lin llegó al lugar un rato después y desde la calle advirtió lo que pasaba en su casa, por lo que se quedó afuera y avisó rápidamente a la Policía, recordó él mismo en una charla con EL DIA.

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“SÓLO QUERÍAN DINERO”

Mientras tanto, a las mujeres “les pegaron en la cabeza con la culata” de las armas, lo que les abrió cortes que dejaron en el piso manchas de sangre y que hicieron que, cuando pasó todo, tuvieran que ir al hospital Rossi” para que les cerraran las heridas con puntos de sutura.

Con respecto a la banda, Lin detalló que estaba integrada por ocho hombres encapuchados, quienes “sólo querían dinero y fue lo único que se llevaron”.

Si bien no precisó el monto, en la denuncia que posteriormente radicó por el hecho en la comisaría Segunda expuso que les quitaron “80.000 pesos”.

En relación al tiempo que permanecieron los ladrones en la finca, precisó que “fueron 15 minutos”, que usaron para revolver todos los muebles “y hasta revisar dentro de la ropa, por si había más plata”.

Una vecina que además le alquila la vivienda a esta pareja de comerciantes explicó que “después del violento asalto que tuvieron en la misma casa hace menos de un mes, se instaló una reja para proteger la puerta de entrada”, porque la vez anterior la forzaron con una barreta”.

Es por eso que las víctimas sospechan que ambos hechos podrían estar vinculados. Con el acceso refozado, ahora esperaron a las víctimas para encañonarlas y poder entrar con ellas.