Cuatro policías condenados por un turbio entramado en una seccional

Más de una década después de una fuga de película en la comisaría primera de La Plata, llegó la sentencia y cuatro policías recibieron una pena de tres años de prisión en suspenso.

Las condenas fueron para Franco Daniel Panne y Marcelo Cifuentes, por el delito de “falsedad ideológica de documento público”, mientras que Cristian Eduardo Silva y Raúl Alberto Moreno fueron acusados de “cohecho”, es decir, cobrar coimas.

El caso se produjo el 2 de agosto de 2011 y fue investigado por la fiscal de instrucción del Fuero Penal de La Plata, Virginia Bravo, que en un comienzo había procesado a siete efectivos.

La titular de la UFI 7 de nuestra ciudad dio por probado que la fuga había sido facilitada para que los presos escaparan a través de un agujero, que hicieron en una pared lindante con una vivienda familiar.

“Que por lo menos entre el día 23 y el 31 de julio de 2011 efectivos policiales que prestaran servicios en la Seccional Primera de La Plata solicitaron dinero a uno de los detenidos allí alojados a cambio de facilitarle herramientas que luego utilizara para la apertura de un boquete, acuerdo que finalmente permitió que dos detenidos pudieran fugar del establecimiento, en tanto que quien habría hecho entrega del dinero no pudo evadirse por las dimensiones del boquete”, expresó la representante del Ministerio Público en su requerimiento de elevación a juicio oral.

En su alegato, la fiscal de juicio Silvina Langone pidió tres años de prisión de ejecución condicional para todos los imputados, más las condiciones de buena conducta: constituir domicilio, abstenerse de cometer delitos y someterse al Patronato de Liberados con presentación bimestral.

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Los dos que se habían fugado (Jorge Rafael Almirón y Adrián Saúl Rivero), pudieron ser recapturados en poco tiempo.

Ante la fiscal dijeron que policías de esa comisaría, les habían facilitado la fuga a cambio de una fuerte suma de dinero y de conseguir trabajos en el mundo del hampa.

En ese sentido, debían cometer a cambio de esa fuga “facilitada”, tres hechos delictivos, cuyos botines serían “marcados” por los mismos uniformados.

En la etapa de juicio la acusación estuvo en manos de la fiscal Silvina Langone quien requirió la pena aplicada por la jueza Claudia Grecco, titular del Juzgado Correccional 4 de la capital bonaerense. Además, la magistrada determinó que los cuatro condenados deberán someterese al control bimestral del Patronato de Liberados.

Silva y Moreno también quedaron inhabilitados de por vida para el ejercicio de la función pública. Mientras que Panne y Cifuentes deberán correr con las costas del proceso.

Como agravante de la pena la fiscal ponderó “la pluralidad de” personas que intervinieron en el hecho solicitud que fue avalada por la jueza que dictó la condena por la fuga de presos.

Cabe recordar que, en la tramitación de este expediente, la jueza garante, Marcela Garmendia, había resuelto sobreseer a Franco Daniel Panne, Marcelo Cifuentes y a P. M., en los términos del artículo 323 inc. 3° y 6°, por el delito de falsificación ideológica de documento.

Sin embargo, los jueces Carlos Ariel Argüero y María Elia Riusech, integrantes de la Sala IV de la instancia de Alzada, rechazaron esa resolución al analizar una apelación interpuesta por la fiscal Bravo.

Expresó la fiscal en su impugnación: “Los imputados sabían que lo atestado -por las actas viciadas- no era exacto y tuvieron la voluntad de suscribirlo, no pudiendo resultar excusa válida, máxime tratándose de policías con experiencia, en razón de la falta de personal de la dependencia intentaron cumplimentar, con las exigencias de las inspecciones. No puedo considerar que falsificar las actas sea una forma de `intentar cumplimentar las exigencias de las inspecciones`, que como dije ó no se hicieron ó se hicieron en forma defectuosa. Mintieron, falsearon la realidad, llegando incluso a falsificar la firma de uno de ellos; lo que entre otras cuestiones posibilitó la evasión parcialmente exitosa”.