Llegó con un mensaje bien directo al corazón Pincha
16 de Marzo de 2009 | 00:00
Poco más de quince minutos bastaron para que en sus expresiones conmueva, ilusione y recobre fuerzas todo el pueblo pincharrata. Con palabras justas, precisas, que llegaron al corazón del hincha, Alejandro Sabella brindó su primera conferencia de prensa, en la que dejó varios mensajes, tanto para los simpatizantes como para los jugadores y hasta para la dirigencia. Lo más jugoso del ida y vuelta que mantuvo con los medios está aquí.
-¿Está empapado acerca del comienzo del campeonato que tuvo Estudiantes y en la Copa? ¿Sabe cuáles son las deficiencias y la prioridad en el trabajo para corregirlas?
-Sí, he hablado con mucha gente y me he interiorizado lo más posible de la situación, más allá de las observaciones que uno puede hacer a través de la experiencia. Hoy lo más importante es el partido del jueves por la Copa Libertadores. Hay que pensar en cómo solucionar o mejorar el rendimiento del equipo y pensar solamente en ese partido.
-¿El gran objetivo será la Copa Libertadores, sobre todo por los resultados que se fueron dando en el torneo local?
-Estudiantes es una institución muy prestigiosa, tiene un buen plantel e indudablemente tiene que tratar de ganar en los dos frentes. En el torneo local porque está en una situación incómoda. Y en la Libertadores porque sabemos lo que representa para el hincha, con toda la historia que tiene. Las dos competencias son importantes.
-¿Lo tomó por sorpresa la propuesta de la CD a partir de esta realidad que vive el equipo? ¿Qué evaluación ha hecho desde afuera de este presente?
-No podría decirte que me tomó ni que no me tomó por sorpresa. Lo que diría es que como no estaba pasando el equipo un buen momento futbolístico, uno siempre tiene que estar preparado por si es solicitada la presencia de uno. Muchas veces, por una razón o por otra, cuando no había técnico en el club, yo era uno de los candidatos. Entonces al ver que el equipo no estaba en una buena situación uno estaba un poco como alerta. Con respecto a lo otro, primero debo hablarlo con los jugadores y luego con ustedes. Yo tengo mi idea con respecto a las falencias que veo en el equipo, pero primero deben saberlo ellos que son los primeros que deben enterarse y segundo, sería una falta de respeto al técnico que estaba anteriormente.
-¿Es un doble desafío para usted, debido a su condición de ídolo y a cómo fue recibido por los hinchas, y por ser su primera experiencia como entrenador más allá de haber acompañado a Passarella en el cuerpo técnico?
-Todos los técnicos tienen desafíos, ésta es una profesión muy linda pero por otro lado muy ingrata. Pero lo tomo como un desafío enorme, porque como dije que me considero un hijo de ésta institución, y si me llama mi padre, por así decirlo, tengo que responder. Debo hacer lo imposible de mi parte para responder a ese llamado, no puedo especular con nada, simplemente decir sí acá estoy presente y cuenten conmigo.
EL ESTILO SABELLA
-¿Existe un estilo definido del Sabella DT?
-Mirá, un técnico puede tener un estilo en general pero normalmente, diría yo en más del cincuenta por ciento de los casos, los entrenadores asumen como me tocó a mí. Es decir porque lamentablemente otro decidió dar un paso al costado. Tenés muy poco tiempo y en general, un seleccionador nacional, o cuando asumís antes de una competencia, te tenés que adaptar a los jugadores de hay. A mí en general me gusta tener un equipo con once jugadores en el que puedas aplicar diferentes sistemas de juegos. Es decir, que no haya que "gastar" o "quemar" o como quieras llamarlo, un cambio para poder tener otro sistema. El ejemplo es la Selección Argentina del Mundial de Francia. Podías jugar con un 3-4-1-2 o 3-4-3 y hasta con línea de cuatro porque a Zanetti lo bajabas a la defensa. Eso lo podés lograr cuanto más categoría tienen los jugadores, sería lo ideal. Pero en el fútbol es muy difícil conseguirlo. Muchas veces debés elegir el mal menor.
-¿Tendrá que trabajar mucho en lo anímico, porque desde lo futbolístico hay materia prima?
-Todo ser humano llega a situaciones difíciles y debe bucear en su interior para sacar fuerzas de donde no tiene, transformar esas flaquezas en fuerza y dar lo mejor de sí, porque creo que como profesionales, tanto los jugadores como el cuerpo técnico, es la función que deben cumplir.
-¿Siente que los jugadores deben sentir la camiseta como por ejemplo, alguien que jugó en River o en Boca?
-Estudiantes ha crecido mucho como institución, está desde hace años en un sitial de privilegio en el fútbol argentino y la idea es mantenernos allí. Y cuando existen algunos resultados adversos, la falta de costumbre hace que exista intranquilidad. Eso es moneda corriente en el fútbol de acá. Mi sueño, mi ilusión y lo que siempre pensé es que la gente de Estudiantes es una familia y tiene un dejo de distinción. Apelo a eso, no porque sea el entrenador, cualquiera sea el DT, que la familia esté unida y muestre que en situaciones difíciles, este club es diferente. Lo tiene que mostrar el hincha, el jugador, el dirigente y el cuerpo técnico, todos debemos hacerlo. Esta institución ha tenido dirigentes que han sido ejemplo, entrenadores que fueron tremendamente ejemplos. Voy a tener el inmenso placer y la fortuna de, aunque sea simbólica o metafóricamente, sentarme en el mismo banco que estuvo Osvaldo Zubeldía, Carlos Bilardo, Eduardo Manera.
-¿Su principal desafío es que la gente, el afecto que le demostró como jugador, ahora lo haga como técnico?
-No puedo especular con esas cosas. Me llamaron, quiero al club, daré lo mejor de mí y en el fútbol a veces se gana, se empata y se pierde. Lo que puedo hacer es esforzarme al máximo para sacar la situación adelante.
-¿Por todo lo que dijo anteriormente, siente una doble presión tener que responder ante esta situación complicada?
-Cuando vos tenés un cariño especial por algo y un sentimiento de gratitud, tal vez estás más obligado a responder. Yo diría que no siento más presión, siento más obligación. La presión es negativa.
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