La antigua planta "Propulsora Siderúrgica" de Ensenada, que en 1993 -por una fusión con otras plantas- pasó a ser "Siderar" y quedó incluida dentro del holding Techint, está cerca de suspender sus actividades y cerrar sus puertas por tiempo indefinido. La medida podría tomarse a partir del 15 de febrero, según confirmaron en forma oficial algunos de sus directivos, y hasta entonces se dispuso que todo el personal tome sus vacaciones.

La antigua planta "Propulsora Siderúrgica" de Ensenada, que en 1993 -por una fusión con otras plantas- pasó a ser "Siderar" y quedó incluida dentro del holding Techint, está cerca de suspender sus actividades y cerrar sus puertas por tiempo indefinido. La medida podría tomarse a partir del 15 de febrero, según confirmaron en forma oficial algunos de sus directivos, y hasta entonces se dispuso que todo el personal tome sus vacaciones.
La planta, considerada la mayor siderúrgica de ciclo integrado en la Argentina y ganadora del premio Invertir en 1999 en el rubro de las grandes empresas, intentará de este modo evitar un colapso financiero causado, de acuerdo a los registros a los que tuvo acceso EL DIA, por la "persistencia de la crisis recesiva del mercado local, sumada a la crisis internacional de la industria del acero".
Fuentes de la empresa admitieron además que "se vienen fraccionando las jornadas laborales y dando vacaciones a todo el personal -unos 750 empleados- desde agosto pasado, lo que continuará entre el 26 y el 31 de diciembre, para luego mantener esa postura durante todo el mes de enero". De este modo, afirman desde el área gerencial, "se puede llegar hasta el 15 de febrero, cuando se analizará qué hacer. Después puede llegar la suspensión oficial de actividades".
La planta, hasta hace pocos años atrás conocida como "Propulsora Siderúrgica", fue oficialmente inaugurada en diciembre de 1969, cuando se previó que para 1979 se estaría produciendo cerca de 1,36 millones de toneladas de acero, que sería transformado en productos planos que se destinarían a las industrias automotriz, naval, ferroviaria y agrícola, entre otras.
En 1999, y ya como una empresa perteneciente al grupo Techint y con su nuevo nombre "Siderar", la planta exportaba sus productos a más de 40 países. Pero la crisis nacional internacional afectó seriamente al emprendimiento. A principios de octubre pasado informó a la Comisión Nacional de Valores (CNV) que tenía un endeudamiento neto de 454,2 millones de pesos, debiendo destinar -sólo en el último trimestre- 10 millones para "desvinculaciones de personal".

CAUSAS GENERALES DE UNA CRISIS PARTICULAR
"El resultado consolidado del trimestre arrojó una pérdida de 15,8 millones de pesos. En igual período del ejercicio anterior (el año 2000) el resultado fue una ganancia de 11,6 millones de pesos", comienza la "Reseña Informativa" aportada por Siderar a la CNV en octubre pasado. "El resultado ordinario consolidado, antes del resultado de inversiones en sociedades vinculadas y resultados extraordinarios, arrojó una pérdida de 3,9 millones de pesos que compara con una ganancia de 14,3 millones en igual período del ejercicio posterior".
El origen del déficit, según la empresa, es macroeconómico. "La persistencia de la situación recesiva del mercado local, sumada a la crisis internacional de la industria del acero, fue la causa principal de la disminución en los resultados", por lo que informan que "se continuó e intensificó el programa de reducción de costos y adecuación de las estructuras de personal, iniciado ya en el ejercicio pasado".
Sin embargo, sigue el informe, "programa de reducción de capital de trabajo (...) permitió reducir el endeudamiento neto de la Sociedad (deudas financieras menos liquidez) de 509,7 millones de pesos al 30 de septiembre de 2000 a 454,2 millones de pesos al 30 de septiembre de 20001".
La crisis recesiva nacional y la merma de los mercados internacionales quedan evidenciadas en la caída de ventas de Siderar, también analizada en el informe enviado a la CNV: "Las ventas netas consolidadas del período ascendieron a 168,6 millones de pesos, comparadas con (los) 233,8 millones de pesos (obtenidos) en igual período del ejercicio anterior".

LOS PASOS A SEGUIR
El personal de la planta de Ensenada comenzó a tomar sus vacaciones en agosto pasado, cuando el balance financiero de Siderar comenzó a ser insostenible. Pero en las últimas semanas tomó forma la decisión de mantener la decisión empresaria durante un tramo de diciembre, todo enero y la primera quincena de febrero.
Siderar integra en la actualidad el trípode de grandes empresas que todavía concentran grandes fuentes de trabajo en Ensenada, junto a la petroquímica Repsol-YPF y la planta de carbón de coke Copetro. Sin embargo, ahora la vieja "Propulsora Siderúrgica" decidió dejar en suspenso todas sus actividades.
"Durante el verano se analizarán los siguientes pasos a tomar", advirtió ayer a EL DIA un vocero de la gerencia de la empresa que prefirió mantener su nombre en estricta reserva. "Por el momento logramos que esté de acuerdo todo el personal y no haya conflictos laborales. Pero luego la decisión final dependerá del mercado".