Se abren nuevos frentes judiciales por las amenazas y las instigaciones

Con la presentación de sendas denuncias, ambas apuntando al uso indiscriminado y temerario de las redes y plataformas de intercambio social que se ofrecen en la web, cobrará nuevo impulso hoy el frente judicial vinculado con el intento de suicidio y posterior fallecimiento de Lara, la joven estudiante del Colegio Nacional que murió anteayer tras permanecer cuatro días internada en el hospital San Martín.

En este marco, la Universidad Nacional de La Plata pedirá que se investigue si existió una “instigación a cometer delitos” desde la red social Voxed, sitio que, en síntesis, ofrece una pizarra virtual en la que se pueden publicar textos e imágenes de cualquier tenor bajo el paraguas del anonimato.

Al mismo tiempo, los padres de los compañeros de la chica que se quitó la vida requerirán que se determine y eventualmente sancione “el uso indebido” de imágenes de los adolescentes como pie para “escracharlos” y formular “amenazas directas” contra ellos.

Hasta hoy, sólo avanzaba en el juzgado federal platense número tres, a cargo de Ernesto Kreplak -que interviene por estar involucrada una institución perteneciente a una universidad nacional-, una causa que está caratulada como “averiguación de ilícito” y en cuyo trámite ya se realizó la autopsia del cuerpo de la estudiante.

En ese expediente, los investigadores intentan determinar “si existió alguna forma de instigación al suicidio”. Esta figura está contemplada en el Código Penal (ver parte), que en su artículo 83 señala que “será reprimido con prisión de uno a cuatro años, el que instigare a otro al suicidio o le ayudare a cometerlo, si el suicidio se hubiese tentado o consumado”.

Otras hipótesis que todavía se barajan tienen que ver con la posibilidad de que Lara haya participado de algún “juego” en las redes sociales, o haya interactuado en alguna plataforma en la que, tras anunciar sus intenciones, haya sido inducida y alentada por otros usuarios a quitarse la vida e incluso atacar a sus compañeros.

En este aspecto, la mayoría de las miradas está puesta en Voxed, sitio en el que ayer se seguían generando tópicos de discusión y debate acerca del trágico episodio, y en el que la joven fallecida habría anticipado con lujo de detalles las circunstancias de su intento de suicidio; expertos informáticos de la DDI La Plata realizan peritajes sobre el teléfono de la adolescente y analizan sus publicaciones con el objetivo de esclarecer el curso de los acontecimientos.

ACTUA LA UNIVERSIDAD

Altas fuentes de la UNLP revelaron ayer que solicitarán a la Justicia que tome medidas. “Hubo conversaciones en las que se proponía que los ‘voxeros’ se juntaran y fueran a matar a los compañeros de Lara”, se dijo con preocupación.

Esto también ocurrió en youtube, con la circulación de un archivo de audio sindicado como prueba de un presunto “bullying”, y cuyos comentaristas expresaron deseos de que alguien tomara represalias contra quienes compartieron el aula con la chica.

Según trascendió, los padres de los alumnos del Nacional van a radicar una denuncia por “instigación a cometer delitos” y “exposición de menores”, dado que varios de ellos fueron objeto de amenazas directas y sus fotos, extraídas de facebook, usadas para revelar nombres, apellidos y otros datos personales, responsabilizándolos de lo que ocurrió con Lara.

“Capturaron imágenes de facebook, las subieron a Voxed con nombres y escribieron ‘asesinos, los vamos a matar’ entre otras barbaridades” se advirtió.

En espacios virtuales como el citado, donde se pueden encontrar apologías de las conductas más abyectas, quienes militan a rajatabla el derecho al anonimato cuando de ellos se trata no dudan en identificar con pelos y señales a los marcados como potenciales víctimas de sus “raids”, como se conocen en la jerga las operaciones grupales de represalia.

DECLARACION POSTERGADA

La semana próxima, la justicia federal comenzará a tomar declaraciones testimoniales en la causa por averiguación de las causas del suicidio; en una primera etapa, se citará a profesores, preceptores y autoridades escolares; luego será el turno de los compañeros, acompañados por sus padres, una vez que sean evaluados por especialistas de la UNLP y se determine quiénes puedan tener algo relevante para aportar y estén en condiciones de hacerlo.

Acto seguido, será el turno de los familiares.