Detienen en Brasil al empresario de la industria frigorífica que acusó a Temer de cobrar coimas

SAN PABLO.- El ex presidente de la empacadora de carne más grande del mundo, cuyo testimonio implicó al presidente brasileño en un caso de corrupción, se entregó a la policía ayer luego que la Corte Suprema de Brasil ordenara su detención. Joesley Batista había esquivado a la Justicia bajo un acuerdo de admisión de culpabilidad, bajo el cual describió cómo la empresa frigorífica JBS sobornó a decenas de políticos, incluso al presidente Michel Temer.

A inicios de este año, Temer fue acusado de corrupción después de que surgieron denuncias de que orquestó un plan donde él recibiría millones de dólares a cambio de ayudar a JBS a resolver un asunto de negocios. Temer niega haber cometido delito alguno. En agosto, el Congreso autorizó que no fuera juzgado mientras permanezca en el cargo.

Pero la extensa pesquisa de Brasil en el masivo intercambio en coimas a cambio de favores entre compañías y políticos, conocida como Operación Lava Jato (lavado de autos), continúa acumulando nuevas acusaciones casi a diario. La semana pasada, el fiscal nacional Rodrigo Janot presentó cargos contra tres ex presidentes y varios influyentes políticos más, acusándolos de crear organizaciones delictivas para saquear las arcas públicas, y las autoridades detuvieron a Geddel Vieira Lima -ex ministro del Gabinete y fuerte aliado de Temer- luego de que fueran hallados 16 millones de dólares en efectivo en un departamento ligado a él.

Janot señaló que presentará más cargos contra Temer. Si lo hace, necesitará tomar medidas en los próximos días debido a que su período en el cargo concluye el 18 de septiembre. Sin embargo, la idea de que Batista y otros retuvieron información podría empañar la investigación del Lava Jato, que se apoya fuertemente en los acuerdos de delación premiada (a cambio de una morigeración de la pena).

Janot quiere investigar si el empresario y otros testigos cooperantes omitieron información en sus testimonios. El procurador dijo que los acuerdos judiciales pueden revocarse si los informantes no dijeron toda la verdad. La revelación sucede luego de que la oficina de Janot recibiera un audio sobre una conversación entre Batista y Ricardo Saud, ejecutivo de J&F Investimentos (la empresa que controla JBS).

Los dos hombres aparentemente no sabían que estaban siendo grabados, y Janot dijo que el material contenía vagas referencias a actividades potencialmente ilícitas que no habían sido reveladas previamente, incluyendo la posibilidad de delitos en su propia oficina y en la Corte Suprema. Fue cuidadoso al decir que cualquier información que reciban las autoridades -como acusaciones contra Temer- siguen teniendo validez.

En su decisión, el juez Edson Fachin consideró que hay suficientes indicios de que Batista y Saud no dieron cierta información a los fiscales cuando formalizaron los alegatos de culpabilidad. Fachin ordenó que ambos hombres fueran detenidos. La decisión se tomó el viernes, pero la corte la hizo pública ayer.