Persistentes con la droga, “Los Raúl” movilizaron a la Policía por tercera vez en cuatro meses

La primera vez fueron 2, la segunda 11 y esta vez 16. En cuatro meses, la Policía le puso las esposas a 29 personas en un radio de cuatro cuadras en el barrio Santa Ana, Melchor Romero. Los operativos, en medio de despliegues con camuflaje por tratarse de una zona hostil a la presencia policial, todavía no lograron dar con la cabeza de la organización, el hombre de 40 años de nacionalidad paraguaya cuyo nombre de pila permitió bautizar a una de las organizaciones de narco menudeo más rebeldes a la acción de la ley: “Los Raúl”.

Los investigadores del área de Drogas Ilícitas de la región todavía tienen una espina, pero ayer se entusiasmaron con los resultados de la incursión. A las seis de la mañana reunieron a 150 efectivos de esa dependencia, de la Caballería, Infantería, del Grupo de Apoyo Departamental y de la Policía Local. Como ocurrió a principios de enero -cuando actuó la Policía Federal- y mediados de marzo, esta vez los policías de la bonaerense volvieron a generar un dispositivo sorpresivo que impidiera huidas y resistencia. Una avanzada, con varias decenas de policías escondidos llegó en la caja de un camión volcador en lo que se denominó “Operativo Caballo de Troya. El Retorno”.

Saltaron a la calle en 163 y 526 para comenzar con un raid de registros y detenciones que se extendió por 164 y 162 bis hacia 527. En total, hubo 13 allanamientos a viviendas de las cuales, según informó una fuente de la pesquisa, en 8 se vendía marihuana y cocaína en dosis personales. Los policías recolectaron 3 kilos de la primera sustancia y 300 gramos de la segunda. También, dos pistolas calibre 9 milímetros y otra calibre 16.

Pan conocido

La marihuana apareció en panes que dejaron un dato significativo para los investigadores: “el análisis macroscópico indica que dos panes tienen las mismas características que la droga secuestrada en la bajada de la autopista”, indicó una fuente de la pesquisa, en alusión al operativo del sábado en el que se hallaron 480 kilos de cannabis prensado, escondido en bolsas de alimentos para perros.

Esa marihuana venía del Gran Buenos Aires, pero se estima que procedía de Paraguay. Ahora, la investigación busca determinar si el detenido el sábado, Ariel Arroyo, también de nacionalidad paraguaya y afincado en Altos de San Lorenzo, proveía a “Los Raúl”.

En la hipótesis policial, la banda tiene anticuerpos que luchan contra la acción de la ley. Siguió operando después de que la Policía Federal llegara con su “Caballo de Troya” en enero y detectara, además de sustancias de corte y estiramiento de cocaína, a una “soldadita” adolescente atendiendo un búnker. Dos meses después llegó la bonaerense, con Drogas Ilícitas a la cabeza y produjo nuevos arrestos. Pero la venta siguió. “Lo que pasa es que se trata de una organización de una familia ensamblada con muchos integrantes. Cuando cae uno, aparece un reemplazo en forma automática”, indicó un policía.

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También tienen albañiles. Según indicó una fuente del operativo, ayer encontraron un “kiosco” en el mismo lugar donde la topadora arrasó otro hace dos meses.