Ómicron: la variante avanza sin pausa sobre Europa y EE.UU. Aumentan restricciones y cuidados

La OMS advierte que Omicron se propaga en las comunidades a una tasa que duplica los casos cada 1,5 a 3 días.  
Por estos días, Europa avanza hacia nuevas restricciones y los Países Bajos planean un bloqueo nacional estricto a partir del domingo.
Por otra parte, el número de casos confirmados de Omicron en los EE. UU registra un aumento del 97% y casi se ha duplicado en un período de 24 horas, mientras que seis estados del noreste registraron un número récord de casos diarios de COVID esta semana, ya que la variante ahora se confirma en 44 estados, siendo Nueva York el más afectado.

Así, la ciudad de los sueños, se ve afectada por el mayor número de casos diarios jamás registrados.
La variante ahora está confirmada en todos los estados excepto Oklahoma, Montana, Dakota, Indiana y Vermont.
Vale destacar que, Nueva York es el epicentro de la variante del brote y estableció nuevos récords de casos tanto el viernes como el sábado.
Paralelamente. los estados del noreste de Connecticut, Connecticut, Maine, Massachusetts, New Hampshire y Rhode Island también han confirmado un número récord de casos diarios de COVID al final de la semana.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) estiman que Omicron representa al menos el 13 por ciento de todos los casos nuevos en Nueva York, que registró su recuento más alto en un solo día de nuevos casos de COVID-19 con 21,908, rompiendo el anterior. récord de 21.027 establecido solo un día antes. 

Aunque las hospitalizaciones de Nueva York, que tienden a retrasarse en los casos nuevos, permanecen por debajo de sus picos, han aumentado un 25 por ciento en las últimas dos semanas, lo que tensiona el sistema de atención médica del estado. 

Los jueves, días fatales. El noreste se ha visto particularmente afectado por COVID ya que Connecticut vio casos que aumentaron a la altura del invierno del año pasado, ya que el estado confirmó 3.229 casos el jueves. 

Maine también vio cómo los casos se dispararon a 1.331 el viernes, y Massachusetts confirmó 7.176 casos el mismo día jueves. 

Y por último, New Hampshire también registró un nivel récord de casos diarios de COVID el jueves, confirmando 1.720 casos, y Rhode Island confirmó 1.406 casos el jueves.   

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Mientras tanto, en el viejo continente, la propagación de la variante, que parece altamente transmisible y capaz de evadir la respuesta inmunitaria de la vacunación o una infección previa, ya ha llevado a Europa al borde de nuevos bloqueos.

Los expertos en salud holandeses están aconsejando a los Países Bajos que impongan un bloqueo nacional estricto antes de Navidad, y se espera que el país cierre todas las tiendas excepto las esenciales a partir del domingo, lo que provocará que los compradores aterrorizados acudan en masa a recoger los obsequios de última hora antes de que desciendan las restricciones. 

A medida que aumentaba el número de casos, los ministros alarmados en Francia y Austria endurecieron las restricciones de viaje. París canceló sus tradicionales fuegos artificiales. Dinamarca cerró teatros, salas de conciertos, parques de atracciones y museos. Irlanda impuso un toque de queda a las 8 pm en pubs y bares y una asistencia limitada a eventos en el interior y al aire libre. 

Un dato penoso: La variante del coronavirus Omicron se ha reportado en 89 países y el número de casos se duplica en 1,5 a 3 días en áreas con transmisión comunitaria, dijo el sábado la Organización Mundial de la Salud (OMS). Omicron se está propagando rápidamente en países con altos niveles de inmunidad poblacional, pero no está claro si esto se debe a la capacidad del virus para evadir la inmunidad, su inherente mayor transmisibilidad o una combinación de ambos, dijo la OMS en una actualización. La agencia designó a Omicron como una variante de preocupación el 26 de noviembre, poco después de que se detectó por primera vez, y aún no se sabe mucho al respecto, incluida la gravedad de la enfermedad que causa.

"Todavía hay datos limitados sobre la gravedad clínica de Omicron", dijo la OMS. "Se necesitan más datos para comprender el perfil de gravedad y cómo la vacunación y la inmunidad preexistente afectan la gravedad". "Todavía hay datos disponibles limitados, y no hay evidencia revisada por pares, sobre la eficacia de la vacuna hasta la fecha para Omicron".

En este sentido, la OMS advirtió que con el aumento de casos tan rápido, los hospitales podrían verse abrumados en algunos lugares. "Las hospitalizaciones en el Reino Unido y Sudáfrica continúan aumentando y, dado el rápido aumento de los casos, es posible que muchos sistemas de salud se vean abrumados rápidamente".

Regresando a EE. UU. En Connecticut, el 74 por ciento de la población está completamente vacunada, una de las tasas más altas del país del norte. También vieron su situación de COVID fuera de control en las últimas semanas. Los casos nuevos aumentaron un 162 por ciento en las últimas dos semanas, y 72 de cada 100.000 residentes dieron positivo al virus todos los días. Mientras que Rhode Island tiene actualmente la tasa de COVID más alta, con 99 de cada 100,000 residentes dando positivo por el virus todos los días, un 63 por ciento más en las últimas dos semanas. También es el segundo estado más vacunado de Estados Unidos, con un 75 por ciento de los residentes completamente inyectados.

El estado más vacunado de Estados Unidos es Vermont, donde el 76 por ciento de los residentes están completamente inmunizados. Sin embargo, el estado todavía está experimentando un aumento propio, con 69 de cada 100,000 residentes infectados todos los días.

Asimismo, fácil es observar que Nueva York y Nueva Jersey se han convertido en los primeros centros de Omicron. Según los datos de los CDC, la nueva cepa representa alrededor del 13 por ciento de los casos secuenciados en esos estados.

Ante este cuadro de situación, se instó a los turistas a que continúen visitando la ciudad más grande del país y dijo que los neoyorquinos deben seguir viviendo su vida cotidiana, aunque vacunados, reforzados y respetando los mandatos de las mascarillas. 

Sin embargo, los restaurantes y bares, barómetros de la vitalidad de la ciudad, estaban tomando cartas en el asunto y cerrándose por su cuenta. Varios dijeron que iban a cerrar porque COVID entre el personal significaba que no tenían suficientes empleados para atender a sus clientes.

Finalmente, los neoyorquinos, que anticipaban uno de los fines de semana más socialmente activos del año, se quedaron con los calendarios vacíos ya que los planes se cancelaron rápidamente en medio de la creciente preocupación por el COVID.