Médicos, famosos y economistas: quiénes son las nuevas caras de la palestra política

“Gente nueva que no esté contaminada con los vicios de la política”. Esa fue la identidad que desde su nacimiento plantearon partidos como el PRO y que, como nunca antes en otro proceso electoral, esta vez se extendió a los armados de varias de las listas que cerraron el sábado para competir en las PASO: empresarios, médicos, economistas, mediáticos y cantantes que, viniendo de otros ámbitos, irrumpieron en el terreno de la política partidaria.

Son los llamados “outsiders” que, ante el desencanto ciudadano por los dirigentes tradicionales y tentados por esos mismos dirigentes que pujan por llevar a sus campamentos brisas de renovación, se anotaron en la pelea por un cargo público. Una carrera en la que, por caso, destaca el salto rutilante de Facundo Manes, la gran apuesta de la Unión Cívica Radical (UCR), novedosa por tratarse de un partido que durante años buscó candidatos en el seno del alfonsinismo.

Por fin, el médico neurólogo, de conocida simpatía radical y que hacía bastante era tentado (sin suerte) por los partidos políticos para alguna postulación, terminó aceptando la invitación a competir para diputado nacional bonaerense y enfrentar a Diego Santilli, el candidato de Horacio Rodríguez Larreta.

Otra figura conocida que sumó la UCR y que tiene algunos puntos de contacto con la de Manes es la del economista platense Martín Tetaz, que (de la mano de Martín Lousteau) al lanzar su candidatura para secundar a María Eugenia Vidal en capital federal reconoció que milita en el radicalismo desde que era un estudiante secundario. En la misma boleta, pero en el séptimo escalón, aparece la historiadora Sabrina Ajmechet, impulsada por Patricia Bullrich y conocida en redes por despotricar contra el oficialismo.

También la lista porteña encabezada por el economista Ricardo López Murphy como precandidato a diputado nacional (y que competirá en la interna de Juntos por el Cambio contra la de Vidal) está repleta de “outsiders”. Ya en el segundo lugar de esta nómina aparece Sandra Pitta, la científica que ganó popularidad en las redes sociales por sus duras críticas al kirchnerismo y por haber popularizado el año pasado el término “infectadura” para cuestionar la gestión de la cuarentena por parte del Gobierno.

Junto a López Murphy se anotaron también Franco Rinaldi, politólogo y especialista aerocomercial, y Gustavo Lázzari, hijo de Lita de Lázzari, que ocupará el espacio del que se bajó Gustavo Segré, un analista político que ganó fama en redes sociales por sus videos en los que critica a funcionarios kirchneristas.

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Siempre dentro de la boleta del economista liberal, el caso más famoso por fuera de la política es el de Roberto García Moritán, empresario gastronómico y economista pero más conocido por ser el esposo de la modelo Carolina “Pampita” Ardohain que estará a la cabeza de las precandidaturas para la Legislatura porteña. Lo curioso es que se medirá contra la lista de Vidal después de haber sido funcionario de su gobierno en la Provincia.

De vuelta al terreno bonaerense, el cantante de cumbia conocido como El Dipy, muy crítico del kirchnerismo en Twitter y cuyos cuestionamientos incluso ha compartido el propio Mauricio Macri, fue otro de los que sonó fuerte hasta las últimas horas del sábado como candidato a concejal de La Matanza por el espacio de Manes. Pero ayer él mismo se encargó de desmentirlo en un extenso hilo de Twitter: “¿En serio pensaron todo lo que se dijo ayer de mi? ¿Qué iba con este y con el otro?”, disparó para después rematar: “No estoy con peronistas ni con radicales ni con JxC. Estoy solo. Sin un peso. Si querés entrar en política, tenés que transar. Yo no transo. Prefiero armarme un partido propio antes”.

También en La Matanza, el cumbiero que sí se animó a la política fue el exGran Hermano Brian Lanzelotta. Lo hará por el Partido Federal que conduce Miguel Saredi, candidato por la provincia de Buenos Aires secundado por Gladys Cabezas, hermana del fotógrafo asesinado José Luis Cabezas, y en el mismo espacio que en la ciudad de Buenos Aires liderará el histórico peronista Julio Bárbaro.

Volviendo a Juntos por el Cambio, la periodista rosarina Carolina Losada será precandidata a senadora nacional. Por el mismo espacio se anotó por una banca en el Concejo Deliberante de Morón el productor teatral Ariel Diwan, que hace un lustro se paseó por los medios revelando infidencias de su escandalosa ruptura con la bailarina Gisela Bernal.

La coalición opositora también le abrió la puerta a otro médico que hace tiempo tiene un lugar en el firmamento mediático como es Carlos Kambourian, que se postulará como concejal en Malvinas Argentinas apadrinado por Santilli y Larreta.

En tanto que el actor Luis Brandoni, de histórica afiliación radical, irá en el último lugar de la lista de Adelante Ciudad, que encabezará el médico y ex ministro de Salud del macrismo, Adolfo Rubinstein, para competir en la interna porteña contra Vidal.

Hay más. Desde el ámbito mediático, la panelista Cinthia Fernández confirmó su candidatura a diputada provincial dentro del partido Unite -que integra el armado de José Luis Espert-, el mismo por el que Amalia Granata llegó a ser diputada bonaerense y que también sumó a la exboxeadora Alejandra “Locomotora” Oliveras como precandidata a diputada nacional.

Florencio Randazzo, candidato a diputado nacional por la Provincia por el frente Vamos con vos fue otro de los que buscó nombres “foráneos” de la política y los encontró en figuras como el histórico periodista de automovilismo Carlos Legnani (creador del programa Campeones) y la empresaria industrial Carolina Castro, que irá segunda en su lista. El atractivo de Castro está en que se convirtió en la primera mujer en integrar el Comité Ejecutivo de la Unión Industrial Argentina, tras haber sido subsecretaria PyME durante el gobierno de Macri.

Esta nueva gama de “outsiders”, dicen los especialistas, busca “oxigenar la oferta política” con figuras populares, capaces de generar empatía y sin ninguna “mochila” política como lastre.

Para tener en cuenta, muchos son expertos de otros rubros. Aunque, más que su profesión, coinciden los analistas, lo que la gente valora en ellos es lo “simbólico”, su buena y diáfana apariencia frente a la maltratada imagen de la política tradicional.

Con la nueva gama de “outsiders” se busca oxigenar la oferta política, dicen los especialistas