Zulema Yoma: "a esta altura de la vida no me sorprende nada"

La ex primera dama Zulema Yoma relativizó hoy la atribución de la muerte de su hijo Carlos Saúl Menem, en 1995, a un atentado de los narcos del Cartel de Medellín, de Colombia, y confió que está "esperando" una contestación de la presidenta Cristina Kirchner para poder "impulsar esta causa".

En las últimas horas se supo que Virginia Vallejo, ex modelo y presentadora televisiva de Colombia, dijo a un canal de noticias de Miami su sospecha de que el Cartel de Medellín, de Pablo Escobar Gaviria, mandó a derribar a tiros el helicóptero que pilotaba Menem hijo.

Yoma confió que no conoce a Vallejo y relativizó aquellos dichos: "a esta altura de la vida ya nada me sorprende, uno no sabe con qué intenciones largan estas noticias, así que no puedo decir nada al respecto. Se dijeron tantas cosas...lo único que pido es que digan la verdad y salvaguardar el nombre de mi hijo".

Con respecto a su comunicación con la Casa Rosada, afirmó que "le mande una notita a Cristina porque tengo fe que tiene que impulsar esta causa y llegar a buen puerto para aclarar qué le pasó a mi hijo".

Si bien aclaró que "todavía no recibí contestación" de la Presidenta, comentó que "sigo esperando porque la Doctora se encuentra sumamente ocupada, lo veo por los noticieros y ser mandataria le lleva mucho tiempo".

Yoma reiteró su opinión de que a su hijo "le tiraron desde abajo" y atribuyó a ello el hecho de que Carlitos "volaba bajo y zigzagueaba" con el helicóptero porque, añadió, "eso es lo que tienen que hacer los pilotos" en esas circunstancias.

Además, recordó que la causa penal "sigue abierta" en el juzgado federal de San Nicolás, cuyo titular es el magistrado Carlos Villafuerte Russo, pero opinó que el juez "da muchas vueltas" y adelantó que se reunirá con peritos del CONICET para analizar si "el material que vamos a entregar (al juzgado) sirve para determinar algo".

Menem junior y el piloto de automovilismo Silvio Oltra se trasladaban, el 15 de marzo de 1995, en un helicóptero y a la altura de la ciudad bonaerense de Ramallo se precipitó sobre un campo sembrado de maíz, con lo cual ambos fallecieron.

En un primer momento se había informado que el accidente se produjo cuando el helicóptero que guiaba Carlitos, de 26 años, cayó tras engancharse con unos cables de alta tensión, versión desmentida por las pericias realizadas por Gendarmería Nacional que dio por probada la existencia de orificios de bala en el helicóptero.

Desde 1995 fallecieron al menos 13 testigos del caso en distintas circunstancias, entre ellos el cuidador del campo donde se precipitó el helicóptero, el perito de la Fuerza Aérea que había asegurado que no se había tratado de un accidente y el entonces jefe de la División Aérea de la Policía Bonaerense que fue el primero en llegar al lugar de la tragedia.

También murieron el hermano del perito de Gendarmería, José Luis Mancini, que demostró la existencia de cinco esquirlas de balas en el fuselaje del aparato; el primer médico que lo atendió y un agente de la SIDE, que le acercó un cassette a Zulema Yoma, donde se podían escuchar presuntos gritos de Carlitos grabados por radio antes de caer