Denuncian una oscura trama por un incendio en 15 y 75

Un incendio en una casa presuntamente usurpada sacudió la calma en un sector de Altos de San Lorenzo, ayer por la madrugada.

Cerca de las 4.30, hubo un estallido y empezó a prenderse fuego un domicilio ubicado en 15 entre 75 y 76.

En ese momento no había nadie en la vivienda. Según trascendió, ese domicilio “estaba ocupado por intrusos desde hacía tres años, y hace cuatro meses se inició la causa”, explicó Marcela Weinstein, la abogada del propietario.

A decir de la profesional, el desalojo de esa casa era inminente, de acuerdo a cómo evolucionaba el trámite judicial, en un juzgado civil y comercial platense.

Weinstein señaló que en ese lugar estaba viviendo una mujer de unos 40 años con dos nenes chiquitos, sus hijos. “Sabiendo que el dueño iba a tomar posesión del bien, la intrusa le pidió al padre que se llevara a los chicos”, explicó la abogada.

Aparentemente, esa persona se fue de la casa en algún momento del sábado. Ayer, cuando estalló el incendio “no había nadie”.

“no quedo nada”

Sobre cómo ocurrió el siniestro hay muy poca información. “Los vecinos escucharon una explosión y vieron que salía humo de la casa. Llamaron a la policía y los bomberos pero no vieron a nadie cerca”, sostuvo, respecto de que por el momento no hay sospechosos concretos.

Los bomberos sofocaron el fuego pero no pudieron evitar que todas las pertenencias que allí había fueran alcanzadas por las llamas.

La cabina de gas de la vivienda fue retirada para evitar algún inconveniente vinculado al incendio, dijeron los vecinos.

“No quedó nada”, resumió la abogada sobre el estado general del interior del inmueble, quien se animó además a decir que el episodio Estuvo preparado”.

Sorpresiva fue la aparición de la mujer que ocupaba la casa horas después del incendio. “Se llevó algunas de sus cosas, aunque estaban todas quemadas. Ahí fue que dijo ‘esto fue cosa de mi novio’”, expresó Weinstein durante una entrevista con EL DIA.

Las paredes y el techo de la casa quedaron totalmente renegridas. Un potente olor a quemado se impregnó en toda la estructura.

Algunos albañiles fueron enviados por el dueño para tapiar las ventanas: quiere evitar una posible usurpación en el futuro.

¿Fue, en efecto, un ataque provocado adrede? Eso se deberá determinar mediante los peritajes realizados en la casa. Ayer aún se esperaban los resultados del informe elaborado por los bomberos.

A partir de lo ocurrido y de las diferentes declaraciones, la policía abrió una causa para investigar fehacientemente cómo ocurrió todo, y qué motivaciones podrían haber tenido los responsables, si es que se trató de un ataque planeado.

En el medio, quedaron las acusaciones hacia quienes vivieron ahí en este tiempo: “Se decía que vendían droga”, contaron en el barrio.