Enorme movilización y pedido de justicia en San Martín tras el crimen de la joven piloto

Familiares de Zaira Rodríguez, víctimas de otros hechos de inseguridad y miles de vecinos de la localidad bonaerense de Villa Ballester se congregaron esta tarde en la puerta de la comisaría local en reclamo de justicia y mayor presencia policial en la zona.

Alrededor de las 18 la gente comenzó a llegar con diversos carteles a la esquina de Alvear y Bulevar Ballester, a metros de la Comisaría segunda de San Martín, en la mencionada localidad del norte del Conurbano bonaerense.

“Zaira era la mejor amiga de mi hija, la conocemos desde que era bebé, para mi familia es como nuestra hija, y no podemos entrar en razón de lo que pasó”, expresó entre lágrimas Mariano, un vecino que portaba un cartel con la frase: “en el reino del revés, la familia tiene miedo, el delincuente tiene un juez”.

En tanto, una mujer manifestó que “Ballester es zona liberada” y que “hoy había patrulleros”, pero que “durante la semana no hay nada”.

En ese sentido, la mujer pidió “que venga el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires (Cristian Ritondo). Ya que dijo que bajaron los índices de seguridad, que venga a Ballester, que venga a San Martín”, enfatizó.

Exigen respuestas a la policía

Cerca de las 19 los vecinos se apostaron en la puerta de la seccional para entregar un petitorio y exigieron la presencia del comisario para que diera explicaciones por los reiterados hechos de inseguridad.

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El comisario y jefe del Comando de Patrullas de San Martín salió a la puerta, y expresó: “Estamos consternados por lo que sucedió, entiendo la situación”.

Entre los insultos de la gente y los gritos pidiendo seguridad y hasta la presencia de Gendarmería en las calles, el jefe policial manifestó que están “trabajando para que la gente viva tranquila”, mientras que aseguró que en las últimas semanas recibió refuerzos por parte del ministerio de seguridad provincial.

El anuncio de la llegada de 15 móviles no calmó los reclamos de los vecinos. “Recién cuando pasa algo grave toman una medida y después, cuando la situación se calma, vuelve a estar todo igual que antes”, apuntó uno de los manifestantes.

A las 19.10 los padres y el abuelo de Zaira llegaron al lugar, identificados con chalecos de color verde, y recibidos por el aplauso de los manifestantes.

“Esto es un dolor que solo un padre al que le falta un hijo puede saber”, dijo llorando Claudio Rodríguez, padre de la víctima, quien agregó que “son los jueces y los fiscales los que tienen que trabajar” por su hija.

También intentó calmar a los vecinos que estaban enfurecidos frente a la comisaría, al decir que “la justicia no se hace con violencia” y que “la policía no tiene nada que ver”.

Minutos después, mientras seguían llegando manifestantes a la zona con carteles con frases como “basta de impunidad, justicia para todos”, y “Gendarmería ya”, los familiares de Zaira ingresaron a la seccional para hablar con la Policía.

Durante la nutrida manifestación abundaron los relatos sobre episodios de inseguridad. Una mujer relató el asalto por parte de un motochorro, en la puerta de su casa. Dijo que el ladrón la arrastró y le fracturó una pierna para arrancarle una riñonera.

Adolescentes que se mueven por las calles de la ciudad también son blanco de los ladrones. La directora del “Instituto Santa Ana”, del que egresó Zaira, contó que “la semana pasada hubo cuatro casos de motochorros. Hay corredores seguros pero que no dan abasto para cubrir todo el camino. Vine a marchar porque no quiero más alumnos muertos”, reclamó desesperada la docente Patricia Valle.

También participaron familiares de Alma, la nena de 4 años baleada el viernes en villa La Rana, a unas diez cuadras del lugar donde mataron a Zaira. La nena viajaba con su mamá, quien se tuvo que desviar por un choque y siguió las indicaciones del GPS. Tres asaltantes intentaron robarle el auto y le dispararon.

Zaira, piloto de automovilismo en la categoría de karting fue asesinada el sábado en Villa Ballester por un grupo de motochorros. Le pegaron un tiro en la cabeza en un asalto cuando estaba junto a su novio, Nicolás Impiombato, piloto del TC Mouras. Un joven de 23 años, con antecedentes penales, fue detenido en la Villa La Rana como presuntos autores del crimen y se busca a un cómplice.