VIDEO. “Satanás Barakus”, el temible ladrón que murió en medio de escenas de pánico, tiros y sangre en La Plata

“Me matas o te mato”. Esta es la frase que momentos antes de morir habría dicho el delincuente conocido en el ambiente criminal como “Satanás Barakus” al quedar cara a cara con un policía.

Todo apunta a que aquellas desafiantes palabras fueron las últimas que dijo este hampón que venía siendo buscado desde hacía varios meses por al menos dos robos a mano armada cometidos en la Región.

Es que segundos después de invitar a un duelo a muerte a un efectivo policial, los estruendos de un feroz enfrentamiento a tiros se adueñaron de la esquina de 515 y 160.

Aún no se tiene certeza de cuántos fueron en total los disparos que se efectuaron. Lo que sí se sabe es que uno de ellos terminó incrustado en el pecho de “Satanás Barakus”, provocándole el deceso casi de manera instantánea.

Según indicaron fuentes policiales, la muerte sorprendió a este sujeto cuando intentaba perpetrar un robo en la zona. No era la primera vez que encaraba un hecho delictivo. Según precisaron fuentes policiales, un frondoso prontuario lo había conducido al penal de Varela de donde se fugó el año pasado aprovechándose del beneficio de salidas transitorias que le habían otorgado.

El informe indica que momentos antes de enfrentarse con la policía y terminar abatido en la cinta asfáltica, el sujeto había abordado a una mujer a la que pretendía despojar de sus pertenencias.

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Si bien el caso es materia de investigación, testigos dijeron a la policía que la mujer se resistió y logró salir indemne del atraco callejero.

Todo apunta a que la situación fue interpretada por “Satanás Barakus” como una verdadera derrota. Ofuscado y con sed de revancha, el sujeto habría optado por volver a increpar a la mujer.

Los investigadores sospechan que, en este marco, fue que decidió realizar algunas detonaciones al aire para amedrentar a la víctima.

Lo concreto es que la balacera terminó provocando un pánico generalizado en este sector de Melchor Romero que obligó a los vecinos a comunicarse al 911.

Es en este momento que entran en escena dos efectivos policiales de la División de Investigación de delitos ambientales La Plata, que venían circulando por la zona a bordo de un móvil de la Policía Ecológica.

“Estaban allí por una diligencia completamente ajena al caso”, precisó una fuente policial. Al llegar a 515 y 160 se toparon con el violento cuadro de un joven manipulando un arma de fuego en plena vía pública.

Inmediatamente, los uniformados relacionaron lo que estaban viendo con los tiros que habían escuchado unas cuadras antes y con los datos que se estaban transmitiendo vía radial a raíz de la denuncia efectuada por los habitantes del sector.

Tras solicitar apoyo, decidieron intervenir y fue así que quedaron cara a cara con el sujeto abatido. El informe policial indica que se le dio la voz de alto al sujeto y se le reclamó que depusiera su actitud.

Pero lejos de acatar la orden y convencido de que volvería a evadir a la Justicia, el sujeto habría lanzado la desafiante frase que encabeza esta nota y posteriormente efectuó varias detonaciones dirigidas al lugar en el que se encontraban apostados los policías.

Si bien aún resta conocer el resultado de la autopsia, según la rápida evaluación que hizo el personal del SAME que concurrió al lugar para asistir al herido, el sujeto presentaba una herida de bala en el tórax, a la altura del pecho.

En tanto, a raíz de que no presentaba signos vitales, se declaró su muerte y de forma inmediata tomó intervención la policía científica.

Al registrar sus pertenencias, la policía accedió a distintos objetos y documentación que les permitió identificar al sujeto. Según indicaron en el informe, se trata de Cristian Alejandro Salinas, un joven de 26 años domiciliado a pocas cuadras del lugar en el que terminó muerto.

Tras confirmar esta información, se realizó un cruce de datos y se pudo establecer que sobre el fallecido pesaban dos pedidos de captura por una serie de ilícitos cometidos el 24 de octubre del 2021 y el pasado 19 de abril de este año. Según quedó establecido, en ambos hechos Salinas habría empleado un arma de fuego.

Pero el dato, por caso, más significativo de la información obtenida por los investigadores acerca de su prontuario es que Salinas se escapó de la Unidad 24 de Florencio Varela en donde se encontraba purgando una condena por otro delito.

Aparentemente, venía gozando del beneficio de salidas transitorias. Debía presentarse en dicho complejo carcelario el día 21 de octubre pero no lo hizo. Tan sólo tres días después terminó sumando un nuevo atraco a su historial delictivo.