En la nueva etapa la Ciudad subió una marcha y el movimiento es más intenso

Después de nueve días de “confinamiento extremo”, que en la práctica estuvieron lejos del rigor esperable para semejante calificativo, La Plata entró ayer en una nueva etapa de restricciones para contener a la segunda ola de contagios de coronavirus. Y se notó en el pulso urbano: la Ciudad subió una marcha.

Ya durante el fin de semana que pasó fue evidente el relajamiento de muchos vecinos que habían salido a copar parques y plazas. Y ayer, en el debut de las limitaciones a la movilidad que se mantendrán hasta el viernes 11 de junio -con excepción del 5 y 6 de junio que se volverá al aislamiento estricto-, el movimiento fue intenso.

Desde primera hora se notó en la cantidad de vehículos que comenzaban a desplazarse por las principales calles y avenidas. En las paradas de micros la gente esperando para abordar las unidades era mucha más que los días previos, a pesar de que el servicio sigue reservado para los trabajadores esenciales.

Los bares y restaurantes pudieron volver a atender, aunque con restricciones, en sus locales. Y se advirtió también que numerosas obras de construcción retomaron su marcha. A su vez, los comercios no esenciales volvieron a levantar sus persianas. Es cierto que muchos igualmente abrieron los días de confinamiento más estricto -cuando no estaban habilitados a hacerlo-, pero ahora se sumaron también el resto de los locales.

Frente a las entidades bancarias se vieron, incluso, largas filas, como ocurrió frente a la sede central del Banco Provincia, por el cobro de los jubilados del Instituto de Previsión Social (IPS).

La actividad fue mermando ya entrada la tarde, y bajó considerablemente el ritmo a eso de las 20, cuando empezó a regir la limitación a la circulación nocturna, que se extiende hasta las 6 de la mañana.

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Además, como se sabe, la actividad comercial funciona hasta las 19, salvo en el caso de los locales gastronómicos, que pueden extender su horario con delivery o bajo la modalidad de “take away”.

Por su parte, continúan suspendidas las actividades religiosas en lugares cerrados; al tiempo que las mismas solo podrán realizarse al aire libre y con un máximo de hasta 20 personas. De igual modo, se mantiene la suspensión de las actividades recreativas, culturales y deportivas en lugares cerrados: éstas solo podrán desarrollarse al aire libre y con un máximo de 10 personas.

Siguen prohibidas, también, las reuniones sociales y familiares.

En otro orden, ayer se conoció un informe de movilidad elaborado por Google, a partir del cual es posible determinar si las medidas de confinamiento estricto tuvieron impacto o no en las calles de nuestra ciudad.

Los mismos se confeccionan a través de la tecnología de geolocalización que poseen los celulares y muestran que el sábado 22, el día que comenzó a regir la cuarentena total, hubo una fuerte baja de movilidad en nuestra ciudad en comparación con el día anterior: 24 por ciento menos de movimiento en tiendas y lugares de ocio; 39 por ciento menos en estaciones de transporte; y 12 por ciento menos en plazas y parques. En este último ítem, igualmente, influyó también que fue un día donde la lluvia fue protagonista.

En tanto, si se lo compara con el sábado anterior (15 de mayo), donde no había restricciones fuertes, la diferencia es aún mayor: 45 por ciento menos de movimiento en tiendas y lugares de ocio; 29 por ciento menos en estaciones de transporte; y 44 por ciento menos en plazas y parques. Además, creció un 11 por ciento la presencia en lugares residenciales.

Si bien la movilidad en los comercios fue aún menor el domingo 23, el lunes 24 (feriado) y el martes 24 (feriado), el panorama cambió el primer día hábil de la semana (miércoles 26): la presencia en tiendas y lugares de ocio creció un 22 por ciento en relación al día anterior (Día de la Revolución de Mayo), según marcan los datos proporcionados por Google.

A la hora de comparar el día 26 con el viernes anterior (21 de mayo), cuando no había confinamiento estricto, se ve una baja del 7 por ciento en lugares comerciales y del 6 por ciento en estaciones de transporte. Lo que sí creció fue la presencia en plazas y parques (un 8 por ciento), aunque vale remarcar que el 21 se registraron precipitaciones.

En La Plata, en líneas generales, se puede ver cómo desde el inicio de la pandemia ha caído fuertemente la presencia de los vecinos en las estaciones de transporte, como así también hay una baja en los lugares de trabajo y una suba en las zonas residenciales debido al crecimiento del home-office.