“Dame la moto o te quemo”, la dura advertencia de dos motochorros

Una pareja sufrió un violento asalto cuando circulaban en su moto por el barrio La Loma. La secuencia delictiva sucedió en casi un instante, pero para las víctimas duró una eternidad.

Según relataron los damnificados, un hombre de 33 años y su pareja, cerca de las 6 de la mañana de ayer habían salido con la motocicleta. Cuando llegaron a la esquina de 44 y 30 los detuvo el semáforo.

En ese momento, dos motochorros -aparentemente mayores de edad- a bordo de una Honda Biz de baja cilindrada y de color rojo los interceptaron, los amenazaron con un arma y les sustrajeron el rodado, no sin antes empujarlos de manera violenta hacia el suelo.

“Dame la moto o te quemo”

La advertencia de uno de los delincuentes fue clara: “Dame la moto o te quemo”, le dijo al conductor.

“Intenté resistirme, pero en un momento se levantó la campera y mostró que tenía un arma de fuego”, manifestó el joven. Por ese motivo, sostuvo: “No opuse resistencia”.

Tanto a él, como a su pareja, no les quedó otro remedio que bajarse de la moto.

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Sin embargo, el ladrón que iba de acompañante los empujó fuertemente, se subió al rodado y huyó a toda velocidad por calle 30 hacia 45, imprudentemente y en contramano. Detrás de él fue su cómplice.

Minutos después de consumado el robo, las víctimas se dirigieron a la comisaría cuarta de La Loma y radicaron la denuncia. En la misma, detallaron ante los efectivos que su motocicleta era marca Mondial.

La dueña del rodado también publicó en las redes sociales un mensaje de auxilio para poder obtener las cámaras de seguridad de la zona.

“Me acaban de robar exactamente a las 6 de la mañana en la esquina de 44 y 30. Quería saber si alguien podría aportarme las imágenes de cámaras de seguridad”, preguntó la joven en un grupo de Facebook.

También solicitaron las filmaciones del dispositivo de seguridad de la zona, para poder identificar a los delincuentes.

La víctima recordó que el sujeto estaba vestido con una campera de River de color negra sin capucha y un pantalón de jean color celeste claro.

Además, detalló que el malviviente “tenía un lunar muy notorio por encima del labio superior, del lado izquierdo y era de tez blanca”.

Sobre el arma que cargaba entre sus ropas, puntualizó que se trataba de una con “culata rectangular, tipo pistola, envuelta en cinta aisladora color negro”.

Sin dudas, la imagen de los motochorros quedó grabada en su memoria. Hasta el cierre de esta edición, los delincuentes no fueron detenidos.