El supuesto femicida optó por el silencio

Mario Rubén Oliver (36) fue conducido ayer al despacho del fiscal Álvaro Garganta, quien lo indagó por el homicidio agravado por el vínculo y por mediar violencia de género (femicidio) de quien era su pareja, Mariana Elizabeth Varela (53). Pero el hombre prefirió mantenerse en silencio por recomendación de su abogado defensor oficial. Cabe destacar que, de acuerdo a los dichos de Oliver, que quedaron plasmados en el acta de audiencia, no sabe leer ni escribir.

Todo pasó en Melchor Romero, en medio de una presunta discusión. Y una vez consumado el desenlace de esa terrible agresión, suelto de cuerpo, el imputado se desplazó tranquilo hasta una dependencia policial, donde confesó lo que había hecho.

Sobre el reciente episodio, cabe mencionar que tuvo lugar en una vivienda ubicada en la zona de 519 ente 173 y 174 y ocurrió el jueves en horas de la mañana.

De acuerdo a lo revelado por fuentes oficiales, el presunto agresor brindó su versión de los hechos y contó que mantuvo una pelea con Varela alrededor de las 5 de la mañana.

Siempre en base a su relato, ese habría sido el contexto que terminó con el peor de los desenlaces.

Voceros confiaron que el implicado confesó que en una de las habitaciones del inmueble “ahorcó a su pareja hasta que la dejó inconsciente”. Luego, en ojotas y pantalón de buzo, se dirigió directamente hasta la comisaría y contó lo que hizo.

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“Creo que la maté”, dijo ante los efectivos que quedaron atónitos ante su testimonio. Minutos después de su confesión, agentes de la comisaría decimocuarta se dirigieron hasta el domicilio y confirmaron el sangriento cuadro.