La trituradora ya funciona a pleno

La trituradora de proyectos viene funcionando a pleno una vez más pese a que en la Superliga recién está amaneciendo y sólo se han cumplido la sexta de las 25 jornadas que componen la programación. Los entrenadores duran lo que un suspiro y ya son seis los que debieron dejar sus puestos antes de tiempo. O sea, exactamente uno por jornada.

La histeria que gobierna al fútbol tiene una vez más como destinatarios directos a los hombres del buzo a los que siempre se convoca para desarrollar “un trabajo” que pocas veces se llega a concretar porque no hay tiempo para nada.

El torneo en juego acaba de superar un récord. Y nada tienen que ver los goles convertidos, ni las actuaciones individuales notables, sino que la marca superada tiene que ver, precisamente, con la permanencia de los sufridos conductores técnicos.

A esta altura, en la Superliga anterior habían tenido que dejar presurosamente sus funciones cinco DT de los 28 equipos participantes (o sea un 17, 8 por ciento), mientras que este año son seis los que quedaron sin trabajo sobre 26 competidores, un 23 por ciento.

Como dato, vale destacar que cuatro de los seis que fueron dados de baja en el campeonato en curso estaban al frente de equipos acosados por el descenso, vale decir ocupando posiciones en la peligrosa zona roja del torneo y como particularidad anotar que los “sanmartines” (Tucumán y San Juan) formalizaron un enroque que llevó al “Yagui” Forestelo de la Ciudadela al conjunto verdinegro y a Walter Coyette a recorrer el camino inverso.

Todos pormenores que se suceden en el día a día de un fútbol que sigue atrapado por las urgencias. Los técnicos han pasado a ser en esta escenografía a ser los protagonistas de “la danza de los bomberos”, como bien definió el presidente de San Martín de San Juan, Jorge Miadosqui a los adiestradores que son requeridos con urgencia para que, matafuego en mano, traten de impedir que el incendio de propague cuando los resultados no ayudan.

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En este ir y venir de “solucionadores” a corto plazo se ha dado la particularidad de que los clubes vienen apelando a adiestradores de la nueva generación. Ninguno de los convocados supera los cincuenta años y a la hora del recuento el más veterano resulta ser Mario Sciaqua (nuevo DT de Patronato) con 48 abriles, seguido por Forestello (47) y Coyette (42). Esto podría variar si Tigre consigue el objetivo de sumar a Rubén Gorosito (54) para tomar las riendas que acaba de dejar libres el Lobo Ledesma.

Mientras las crónicas de todos los días tengan que seguir ocupándose de los directores técnicos que están “en la cuerda floja” continuaremos asistiendo a esta bien llamada “danza de los bomberos” que prioriza las soluciones fáciles sobre el trabajo a tiempo completo.