Cancelan la precuela de “Game of Thrones”: ¿Satura la fantasía en la televisión?

HBO había anunciado su primera precuela de “Game of Thrones”. Tenía protagonista de alto perfil, Naomi Watts, y un gran elenco que incluía nombres como Miranda Richardson, Naomi Ackie y Josh Whitehouse. Contaba con el desarrollo del propio George R.R. Martin, junto a Jane Goldman, guionista de cintas como “Stardust” (2007) o “Kingsman: The Secret Service” (2014).

Pero nunca verá la luz: Goldman, que iba a ser la “showrunner” (máxima responsable de una serie) de esta precuela, ha escrito correos electrónicos a su equipo y reparto anunciando que el proyecto no seguirá adelante. Y horas después de que se conociera la cancelación, HBO anunció el desarrollo de una nueva precuela, “House of Dragon”, que se encargará de contar el pasado de la casa Targaryen. ¿Qué pasó?

UNA SÍ, OTRA NO

Aunque los anuncios se dieron casi en simultáneo, y uno fue realizado por el equipo técnico mientras el otro fue lanzado por el propio canal, se desconoce si la decisión de dar de baja un proyecto, que ya tenía incluso su piloto filmado, y dar luz verde a otro, están conectadas.

Pero no sería descabellado: HBO decidió preproducir cinco precuelas del mundo fantástico que fue el mayor éxito televisivo del lustro, pero desde el inicio avisó que no produciría todos. Y más allá de lo avanzada que se encontraba la serie protagonizada por Naomi Watts, es probable que si el piloto decepcionó y en el horizonte apareció un mejor proyecto, el canal premium haya decidido simplemente mover los fondos de un lado a otro.

EL REY DE LA NOCHE

Pero la hipótesis más fuerte en las redes relacionaba la cancelación de la serie no con su calidad, sino con su contenido: la precuela de Watts iba a explorar el pasado profundo de Poniente y, según rumores, detallaría el nacimiento del Rey de la Noche en el fondo de las habituales intrigas palaciegas (como hiciera la serie original).

Sin embargo, el final de la serie decepcionó a los seguidores, además de cambiar bastante de la historia que planea contar Martin en sus últimas dos novelas, aún sin publicar, por lo que los productores y el canal habrían percibido que el personaje del Rey de la Noche ya no representaba interés para el público y, además, remitía a aquel final anticlimático que despertó tanta ira en los fans. En las redes, se especulaba que este había sido un factor clave para la cancelación de la serie tras la grabación del episodio piloto (algo que, por otro lado, no es tan raro: se producen cientos de pilotos pero pocos se convierten en serie, aunque en el nuevo panorama televisivo ese sistema estaba quedando de lado, apostando por autores y estrellas del cine antes que por capítulos simples).

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COSTO, BENEFICIO, OFERTA

El desinterés, además, podría haberse acrecentado en la audiencia desde el final de “Game of Thrones”: la grilla de HBO ya incluye varios shows de fantasía (aunque muy diferentes) que debutaron con el objetivo de ser “la próxima ‘Game of Thrones’”, pero que lejos están de generar el mismo interés de la crítica o la audiencia. Series como “Watchmen”, que no llega al millón de espectadores (“Thrones” debutó con más de dos millones), o “Westworld”, una serie cuyo rating mermó a medida que progresaba su trama confusa, son costosos proyectos que no han dado tanto rédito, a pesar de fuertes campañas de marketing, al canal, que además estrenará el lunes “His Dark Materials” y prepara para su plataforma on demand una serie de ciencia ficción de Ridley Scott.

Quizás la fantasía no era un género en auge, sino un fenómeno que estalló gracias a la calidad de “Game of Thrones”. Y para colmo, el mercado está desbordado de productos que quieren imitar ese éxito, lo cual suma a un interés en baja. Mientras tanto, los grandes éxitos de HBO este año fueron “Succession” y “Chernobyl”, dos series realistas y de mucho menor costo: producir un show del género fantástico involucra un alto costo para extras, efectos especiales, posproducción, vestuario, escenarios. No es de extrañar que la casa de producción cuide su inversión y, si ve que el piloto no es el esperado, o que la historia no genera interés, decida desenchufar el proyecto antes que continuar gastando millones de dólares.

LA LLEGADA DE HBO MAX

La última pata de la ecuación de la cancelación es el desembarco inminente de HBO Max, la plataforma de streaming que competirá con Netflix, pero que no es el equivalente de la actual HBO Go: Max, que llegará en mayo de 2020, ofrecerá alrededor de 10.000 horas de contenido, producidas por Warner, la compañía madre de HBO, que sumará al catálogo las series del canal premium, las películas y series de la comiquera DC y hasta “Friends” (al menos en Estados Unidos).

La lista de apellidos que crearán contenido para la plataforma (pero no para el canal) incluye a JJ Abrams, Phoebe Waller-Bridge (“Fleabag”), Julian Fellowes (“Downton Abbey”) y David Simon (“The Wire”). Hasta aquí, HBO (el canal) venía produciendo contenido de calidad intentando competir mano a mano, y solo, con Netflix; pero con la llegada del servicio on demand de Warner, todo el peso no recaerá en sus hombros. Y quizás el canal no necesite entonces producir series sin parar, y decida volver a una vieja estrategia: menos (contenido) es mas (calidad).