Violencia extrema en una jornada de asaltos y entraderas en la Zona Norte

La tarde estaba completamente terminada pero la hora, alrededor de las 19.50 no indicaba una previsión como para esquivar a ladrones. Mucho menos, tan violentos. Quizás esa confianza le impidió al ex juez Ricardo Larroza (64) prever una situación de extrema violencia como la que se inició cuando una banda de ladrones lo interceptó en la puerta de su casa y lo sometió una feroz golpiza para escapar luego con un poco de plata.

Fue el atraco que más impactó por la violencia, pero no el único de las últimas horas.

El final del sábado llegaría con una secuencia de robos a mano armada en la zona norte de la Ciudad que incluyó un supermercado situado en 146 y 472, y asaltos a repartidores de aplicaciones telefónicas, a pocas cuadras de ese punto -ver pag. 17.

La mancha podría extenderse hasta La Loma, donde una pareja de jubilados denunció que fue abordada en su vivienda de 24 entre 37 y 38 en momentos en que estaban junto a un familiar de 94 años. Todo ocurrió por la noche. Los ladrones los ataron con cables y precintos y huyeron con dinero.

La reiteración de episodios y la violencia que los acompañó generan inquietud en todo un amplio sector del distrito.

Por caso, este fin de semana, varios vecinos del Barrio Don Carlos -en Hernández- que hablaron con este diario atribuyeron los asaltos en esa urbanización de viviendas familiares a una banda de ladrones en la que predominan los “acentos extranjeros” y la audacia, según coincidieron.

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“Hemos sufrido varios asaltos y todos tienen la misma modalidad: entran a su casa sin importarle que estés adentro. Pueden atacarte en la vereda o entrar por un parque y romper una ventana”, le dijo a este diario Francisco. El hombre, renovó el reclamo de mayor seguridad en la zona, tras recibir el impacto de los asaltos de las últimas horas.

También hacían cálculos ayer en City Bell, tras el ataque al ex juez Larroza: “es el mismo tipo de asalto que tuvieron en 16 bis y 490”, arriesgó un vecino del magistrado.

Eso ocurrió el viernes. Un hombre y su hija estaban barriendo la vereda de su casa cuando los atacó una banda de 4 ladrones que irrumpieron en una camioneta negra de alta gama. Los obligaron a ingresar a la casa, donde estaba la pareja del hombre y madre de la joven.

Una vez que se encontraban todos en el interior de la casa comenzó la pesadilla. Los delincuentes pusieron en marcha un feroz interrogatorio que incluyó golpes y amenazas con armas. Exigían plata.

La violencia física se dirigió hacia el dueño de casa. Luego de los ladrones huyeran con 10 mil pesos y algunos objetos de valor, la víctima debió recibir atención médica y durante el fin de semana permaneció en observación.

AL HOSPITAL

También pasó varias horas en el Hospital de Gonnet el ex juez Larroza. Los asaltantes lo atacaron con furia, según calcularon investigadores que recorrieron la casa regada por su sangre.

Sus familiares decidieron trasladarlo al centro de salud una vez que la banda huyó con unos 5 mil pesos, un juego de llaves y el control remoto del portón de acceso a la vivienda.

Según las primeras investigaciones, el ex titular del Juzgado Comercial y Civil Nº 20 estaba parado en la puerta de su casa cuando fue sorprendido por delincuentes que llegaron a bordo de un VW Fox gris. Uno de los integrantes de la banda empezó a pegarle en la cabeza con la culata de un revólver. Ya iban camino al interior de la casa, donde estaba su pareja. Lo que ocurrió adentro es materia de investigación.

Tras recibir el alta médica, Larroza y su pareja pudieron declarar ante los investigadores. La violencia de la agresión empujó ayer una hipótesis sobre un conflicto familiar como disparador del ataque.

Sin embargo, en Tribunales, donde la fiscal penal María Eugenia Di Lorenzo instruye la investigación del episodio, consideraron que ese móvil “no está acreditado”. En cambio, los pesquisas se centraban en la búsqueda de pistas sobre la banda y los vínculos posibles con otros hechos en la zona.

En la Policía aclaran que el vehículo no es una marca determinante en una cadena de hechos. Los ladrones suelen tomar un auto para cometer uno o varios robos en un lapso corto y después lo abandonan.

Esa línea podría aplicarse en uno o varios hechos de las últimas horas. En particular el asalto al mercado situado en 146 y 472, y el atraco posterior a un “delivery”, en 132 y 473.

En la Policía sospechan que se trata de delincuentes de la zona pero no estarían vinculados al ataque a Larroza pese a que todo ocurrió en el mismo horario. Primero habrían robado una camioneta Citroën Berlingo y con ese vehículo habrían seguido hacia esos dos puntos.

Al final, antes de abandonar la camioneta, habrían robado otra moto en 426 y 27, Villa Elisa.

La investigación tendría sospechosos identificados que viven a pocas cuadras. Al mercado ingresaron dos ladrones y redujeron a punta de pistola a la mujer que atendía. Tomaron el dinero de la caja y huyeron. Todo fue registrado por la cámara del negocio.

El asalto al repartidor también fue filmado, pero por la cámara de una casa. A las 18.45, el joven llegó en su moto, entregó un pedido y estaba por irse cuando fue abordado por dos sujetos que bajaron de la camioneta blanca. Tuvo que levantar las manos y ver cómo huían con su moto. “El barrio siempre fue inseguro, pero últimamente está más difícil”, lamentó un vecino de esa cuadra.