En bicicleta, hacía delivery de cocaína por Los Hornos: cayó con casi 400 gramos en 162 y 58

La zona es más bien rural y humilde, con pocas casas por manzana -muchas están en obra- y terrenos baldíos. El chaperío se mezcla con construcciones de ladrillo hueco y el asfalto con algunos senderos de tierra. Por ese sector situado en el “corazón” de Los Hornos, una mujer circula los caminos a bordo de una llamativa mountain bike, de color rojo y blanco.

En el barrio la conocen casi todos. Posiblemente, hasta ayer, muchos le temían. Una denuncia anónima cambiaría la historia de la repartidora que en las últimas horas quedó detenida, acusada de hacer “delivery de cocaína” en el rodado.

La capturaron luego de dos procedimientos llevados a cabo por la Delegación Departamental de Tráfico de Drogas Ilícitas y Crimen Organizado, en los que hallaron cantidades importantes de la droga y otros elementos.

En la causa interviene la Unidad Funcional de Instrucción N° 18, a cargo del fiscal Hugo Tesón, y el Juzgado de Garantías N° 6, cuyo titular es el juez Agustín Carlos Crispo.

REPARTO BLANCO

Delimitar el área en el que operaba la aprehendida es todavía parte de la investigación. Pero lo cierto es que, como se dijo, un llamado anónimo alertó de la situación a las autoridades.

La denuncia indicaba que se la había visto en dos domicilios cercanos. Uno estaba situado en 161 entre 58 y 59, el restante a una cuadra, en 162 ente 58 y 59. Y hacia ambos inmuebles fueron los efectivos policiales.

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Conforme informaron voceros oficiales, la pesquisa comenzó a fines de mayo. El 25 de ese mes fue recibido un llamado en el que se aseguraba que en 162 entre 58 y 59 “se estaba comercializando estupefacientes”.

Con ese dato se inició el proceso investigativo. Primero se le dio aviso al magistrado interviniente para que validara la acción. Luego se llevarían a cabo operaciones de campo para determinar la veracidad de la acusación. El operativo incluyó “filmaciones, seguimiento y vigilancias”, señalaron las fuentes consultadas.

Así se logró establecer que, en realidad, la venta se hacía en dos domicilios. Quien manejaba la transacción era una mujer de nacionalidad paraguaya. Y no sólo ofrecía el producto desde las viviendas, también tenía un servicio de delivery en bicicleta.

“El rodado es una Raleigh y para hacer el reparto y las entregas se vestía con un equipo de gimnasia”, refirieron. Cuando lo recabado fue suficiente para dar el siguiente paso, los agentes solicitaron sendas órdenes de registro al juez.

En la vecindad, al ver llegar a los móviles policiales, se generó un revuelo notable. No fue hasta que frenaron en la dirección determinada que entendieron lo que iría a ocurrir.

Los dos allanamientos dieron resultado positivo y la sospechosa fue detenida. Según revelaron los investigadores, la Policía le incautó la suma de 15 mil pesos (en billetes de baja denominación), tres bolsas de nylon con “piedras” de cocaína con un peso total de 300 gramos, 36 envoltorios o “bochitas” listas para la venta (51,6 gramos) con la misma sustancia, un teléfono celular, una balanza de precisión, un contenedor plástico (todos elementos de corte), además de seis envoltorios de nylon con la droga (unos 30 gramos) que estaban siendo “envasados”.