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Policiales |A UN MES DEL HOMICIDIO EN EL TALLER DE TOLOSA

Creen que el cuñado del mecánico le cebó mate, lo asesinó y le robó dinero

El acusado quedó detenido y se negó a declarar. Se supo que varios testigos lo vieron en la escena y cámaras lo complican tras el crimen

Creen que el cuñado del mecánico le cebó mate, lo asesinó y le robó dinero

Familiares de Fernández se reunieron anoche para encender velas y pedir justicia frente al taller / D. Alday

4 de Diciembre de 2021 | 03:12
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Juan Carlos Lamarque (63), el acusado de matar de un tiro en la cabeza a su cuñado Alejandro Fernández (52) en el taller mecánico que éste tenía en Tolosa, quedó formalmente detenido ayer, fue indagado y se negó a declarar, informaron fuentes judiciales.

Esto sucedió después de que el juez Agustín Crispo avaló el pedido de detención que planteó la fiscal Cecilia Corfield para Lamarque por el delito de “homicidio calificado por alevosía, agravado por el empleo de arma de fuego en concurso real con robo”. A criterio de la fiscal existen “motivos bastantes para sospechar” que Lamarque “resulta ser probablemente autor penalmente responsable de los hechos” ocurridos el 3 de noviembre pasado en el taller de Camino Belgrano entre 525 y 526.

“La circunstancia de haberse hallado el cuerpo” dentro “de la fosa, lo que da cuenta que se encontraba acompañado por alguien de su confianza, pues conforme surge de las declaraciones obrantes en la causa Fernández ‘no bajaba a fosa del taller en presencia de un extraño’”, argumentó Corfield en el planteo al que accedió este diario, “ni dejaba abierta la reja del local, la que solo podía abrirse desde el interior.”

Frente a ese taller donde Alejandro pasó parte de su vida y fue asesinado a traición, sus familiares se reunieron anoche para encender velas en su memoria y pedir justicia, a un mes del crimen.

Para el esclarecimiento del caso resultaron clave los aportes de testigos que estuvieron con la víctima o pasaron por su local antes o -se estima- en el momento del ataque, además de la reconstrucción de los movimientos del acusado a partir de registros de cámaras de seguridad.

Una de las últimas personas que estuvo con Fernández, quien además de mecánico era policía, declaró que en la tarde del crimen estaba en el taller cuando “llegó el cuñado de Alejandro”, a quien describió con bastante justeza, e incluso contó que el ahora detenido se ofreció a “cebar unos mates”.

El día del crimen Alejandro Fernández contó dinero y lo guardó en una registradora

 

También estuvo en el lugar un proveedor y trascendió que en determinado momento el mecánico “se metió en la oficina que está en el taller” para contar dinero, momento en que uno de los testigos le sugirió, en broma, que no contara “plata delante de la gente”.

Según consta en la causa, Fernández respondió que “no pasaba nada” porque “estaba el portón cerrado” y había gente de confianza. Guardó el dinero -dos “paquetes con un gomín”- en una caja registradora antigua, efectivo que desapareció de la escena, confirmaron fuentes del caso.

Otro testigo aseguró haber pasado por el taller alrededor de las 17.55 del 3 de noviembre, recordó ver la persiana “levantada y el portillo de alambre cerrado”, que Alejandro colocaba para evitar que “la gente se metiera en el taller”. Según dijo, le gritó al mecánico para que le abriera, pero en su lugar apareció un hombre cuya fisonomía coincide con la de Lamarque -aportaron los investigadores- para anunciarle que Fernández había salido.

La víctima fue encontrada a las 18.05 de ese día por un amigo que pasó por el taller y le llamó la atención “que el portillo de tejido” de seguridad estuviera “sin la cadenita que lo cerraba”. Entró, llamó a Alejandro y se acercó a la fosa, donde había un auto. Allí lo vio, tirado adentro, con una tapa de cilindro y baterías encima.

LA RECONSTRUCCIÓN

Bajo la instrucción de Corfield, los detectives de Homidicios de la DDI reconstruyeron los movimientos de Lamarque, estableciendo que llegó a su domicilio de 21 bis entre 524 y 525 a las 17.55, por el registro de cámaras de seguridad. “Por la distancia, el horario se ajusta a la data del crimen”, detalló un pesquisa.

Esa casa fue una de las dos allanadas el jueves en busca de un arma de fuego que no encontraron, aunque secuestraron teléfonos celulares. El otro domicilio que revisaron es del hijo del imputado, donde no hallaron elementos de interés para la causa. Por el momento, la hipótesis más firme es que Lamarque- que es hermano de la esposa de Fernández- “habría actuado solo”.

Las hermanas del mecánico y otros familiares directos lo recordaron anoche frente al taller y reclamaron justicia.

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