De víctima a victimario: investigan si fue herido por un motochorro o una policía

En una escena con reminiscencias de la que vivió dos semanas atrás entre La Loma y Los Hornos, cuando apareció herido un joven que se creyó repartidor y víctima de un robo a mano armada, la Policía investiga ahora si un adolescente de 16 años fue baleado en el abdomen por motochorros o bien formaba parte de un terceto de presuntos ladrones en moto a quienes repelió a tiros una agente de la Policía.

Según informaron fuentes de la fuerza vinculadas con el caso, por un lado están las palabras que habría pronunciado el adolescente cuando fue internado en el Hospital San Martín a raíz de una herida de arma de fuego en la zona abdominal, con orificio de entrada y salida. La herida, se informó en base al parte médico, fue de carácter leve y el chico estaba fuera de peligro tras una intervención quirúrgica.

En la charla, apuntaron las fuentes, el joven habría señalado que resultó herido en inmediaciones de 96 y 115, mientras estaba junto a un familiar de 18 años, a bordo de una moto.

Una de las versiones que se escuchó ayer indicaba que los habían atacado motochorros. Otra, que los agresores se habían acercado en moto, pero el disparo se produjo “sin mediar palabra”.

El hecho se registró en la noche del sábado, alrededor de las 20, según se estableció ayer.

Alrededor de ese horario, en la jurisdicción de la comisaría octava se reportó un atraco en el que una oficial de la Policía denunció haber sido víctima de tres motochorros.

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Siempre según esa versión que derivó en otra actuación policial, la mujer (cuyos datos no trascendieron) repelió el asalto registrado en 25 y 79 usando su arma reglamentaria.

La policía -indicó la fuente consultada- hizo un disparo que dio en el abdomen de uno de los ladrones. Uno de los investigadores agregó que a esos datos se le sumó la sospecha abierta una vez que el adolescente mencionó dos puntos distintos como escenario del ataque que denuncia: las esquinas de 96 y 115, y de 96 y 117.

En Villa Montoro donde se habría producido el sangriento episodio, según el adolescente, ninguno de los vecinos consultados por este diario se percató sobre lo ocurrido.

Algunos, atribuyeron no haber siquiera escuchado la detonación de arma de fuego a que “había mucho viento y lluvia a esa hora de la noche” del sábado.

Uno de los frentistas, apuntó que “cuando llueve, es común que los `chorros` salgan a robar, aprovechando que en la calle no queda nadie y el ruido de la lluvia muchas veces tapa a otros”.

En la cuadra de 96 y 115 no dejaron pasar la oportunidad de expresar que la zona se volvió muy insegura. “La gente que vive acá desde hace más de 30 años, nos dice que en aquella época el barrio era bastante tranquilo, pero desde hace unos años, todo cambió”, apuntó uno de los frentistas.

Hasta anoche, todo era sospecha alrededor del caso.

falso repartidor

El martes 11, por la noche un joven de 18 años apareció herido de bala en Los Hornos, al lado de una caja de la aplicación Rappi. Fue enviado de urgencia al Hospital San Martín, con un pronóstico de lesión grave en el abdomen.

Se sumaba así un nuevo episodio de violencia extrema contra un sector de crecimiento explosivo en el contexto de la pandemia y el desarrollo de la tecnología de las comunicaciones.

Sin embargo, esa hipótesis duró horas. O minutos.

Los policías de la comisaría tercera de Los Hornos accedieron rápidamente a un reporte de la seccional de La Loma en el que se señalaba que un oficial del Servicio Penitenciario había sido abordado por motochorros equipados como repartidores, en 43 entre 24 y 25.

Ante el cuadro que describió, el agente sacó el arma y disparó.

En cuestión de horas, el joven quedó internado con una custodia policial, como acusado. El joven que iba como conductor de la moto también fue arrestado.

Unos días más tardes, el cuadro se agravaría para ambos.

Según informó la Policía, a raíz de la difusión del caso, se presentó un joven que había sido víctima del robo de su bicicleta, el 4 de mayo, en 72 entre 133 y 134. Vinculó al dueto con el caso en el que resultó víctima y además lo hirieron de un disparo en una pierna.

Así las cosas, tras un allanamiento, ambos jóvenes sumaron una segunda causa por otro asalto sangriento.