Isabel II: casi un siglo de vida, en su mayoría dedicado al reinado

Su Majestad la reina Isabel II del Reino Unido ha cumplido años el pasado 21 de abril. Ya suma 96 en este mundo y al no ser un número redondo hubiera pasado como un cumpleaños más. Pero resulta que este año cumple también 70 años en el trono y pronto comienzan las celebraciones. Y resulta, también, que por primera vez sus súbditos se están dando cuenta de que su reina es tan vulnerable a la vejez como cualquiera de ellos y, como un conjuro comunitario para evitar lo inevitable, han sentido que este cumpleaños era especial.

Isabel ha reducido su participación en eventos fuera del palacio, tiene serias dificultades para caminar, usa bastón y audífono, los vestidos le quedan grandes y le cuesta asumir la vida sin Felipe, pero los ingleses ignoran su “no inmortalidad” como ignoran la lluvia en primavera.

Eso sí, sus achaques son solo físicos porque se mantiene tan lúcida como siempre lo que le permite seguir una agenda nutrida con servicios de videoconferencia a través de los cuales da la bienvenida a los embajadores y mantiene conversaciones con los integrantes de las organizaciones de la que es patrona.

Por sus redes supimos también que su cumpleaños lo pasó en Sandringham, la casa de campo que se encuentra a 180 kilómetros de Londres y durmió en Wood Farm, la granja preferida del duque de Edimburgo y donde se preparan los caballos para el gran acontecimiento ecuestre de la temporada: el Derby de Epsom. Puede que la reina no asista al servicio religioso o a algún desfile pero está absolutamente decidida, dicen, a estar presente en la única carrera de los cinco clásicos del Reino Unido que hasta ahora le fue esquiva a su tropa. Nunca un caballo de la reina ganó Epsom. Veremos si este año le dan una alegría.

Retrato de Isabel II a los 2 años

Como bien saben los lectores, la reina no festeja su cumpleaños el día de su nacimiento sino en junio con un desfile de caballería llamado Trooping the Colour. El único festejo ahora fue a través de las redes: la Casa Real publicó una fotografía que nos muestra a Isabel a los 2 años, una niña de sonrisa inocente que no estaba para nada destinada a ser reina. Por ese entonces su padre era el segundo hijo de los reyes Jorge V y Mary y, por lo tanto, el príncipe heredero era su tío David. Además Isabel aún podía tener hermanos varones que la desplazarían de la improbable cercanía al trono. Pero el destino se torció: el tío abdicó al trono para casarse con una mujer “no adecuada” y su hermano, el padre de esa niña, se convirtió en rey y ella, que no tuvo hermanos varones, en heredera primero y en reina después. No se le borró la sonrisa nunca pero ya no era una sonrisa inocente.

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También en este cumpleaños se difundió una de las fotografías más bonitas de la reina. Se capturó en los jardines de Windsor el mes pasado y es prácticamente bicolor: en blanco, el color que Isabel siempre ha elegido para los grandes acontecimientos de la monarquía, y en verde, el preferido de su fallecido esposo. En un marco de árboles de magnolia florecidos aparece ella con el pelo íntegramente canoso y tapado de corte y color militar, rodeada de sus ponies preferidos, tan blancos como su cabello. Bybeck Nightingale y Bybeck Katie miran con el mismo dejo de dulzura y nostalgia que su dueña que, por primera vez en años, no ha aparecido montándolos.

La reina fue saludada por sus nietos a través de Instagram y todos coincidieron en algo: “Granny”, como la llaman, es una fuente de inspiración y un ejemplo a seguir. El primer ministro, Boris Johnson, recordó en su mensaje de salutación, el día que la reina hizo un paso de comedia con Daniel Craig para la apertura de los Juegos Olímpicos de Londres en 2012. Él, como James Bond, y ella como la reina que se subía a un helicóptero y se lanzaba en paracaídas para descender en la propia tribuna del estadio. Era un truco, claro, pero Johnson recuerda, y tiene razón, que la ovación que recibió la reina y la admiración de quienes lo veían en sus hogares “demostró una vez más la capacidad única de Su Majestad para reunir a las personas en alegre armonía”.

La reina pasó su cumpleaños con su estilista y amiga Ángela Kelly ya que, por indicación médica, no tenía permitido recibir a nadie. Evidentemente está entre algodones para que se encuentre en plena forma para el Jubileo de Platino.

Retrato de Isabel II en su 96 cumpleaños

Otro de los homenajes vino de la mano del guitarrista de los Rolling Stone. “Ella es la musa de mi más reciente retrato”, publicó Ronnie Wood en las redes a la vez que mostraba una pintura de Su Majestad realizado por él mismo.

La compañía Mattel obsequió a la reina con una Barbie a su imagen y semejanza. La muñeca aparece vestida de gala, lleva una réplica de la tiara que usó en la boda con Felipe y luce banda y condecoraciones. Una perfecta reproducción aunque el rostro se parece más a de la actriz Helen Mirren en la película The Queen que a la propia Isabel. La edición se agotó en 24 horas a pesar de costar casi 100 dólares.

En los días previos a su cumpleaños la reina recibió una vista muy especial: la de los duques de Sussex. A Harry lo había visto apenas un rato el año pasado cuando falleció Felipe pero a Meghan no la había visto más desde que la pareja decidió mudarse a Estados Unidos.

Harry y Meghan debían asistir, en los Países Bajos, a la inauguración de los Juegos Invictus y con muy buen tino pasaron a visitar a la abuela que los habrá recibido con gran alegría. Harry también se reunió durante quince minutos con su padre aunque no trascendió el clima ni el tema del encuentro.

Paseo por los jardines del palacio días después de su cumpleaños / Web

Los Invictus es una competencia de juegos adaptados en el que participan veteranos de guerra y militares heridos o con enfermedades. Fueron creados por el propio Harry en 2014 y en sus diferentes ediciones han contado con el apoyo de la propia reina, de Barack Obama, del príncipe Federico de Dinamarca y del rey Guillermo Alejandro quien, al ser La Haya la sede de 2022, estuvo acompañando al príncipe en algunos partidos. Es una iniciativa de la que Harry puede sentirse orgulloso y en la única en la que ha seguido trabajando entre todas las asumidas antes de su boda con Meghan.

Todo parecía ir sobre rieles: un reencuentro con la familia y un éxito en los Invictus. Pero Harry tiene la manía, desde adolescente, de meter la pata. Y esta vez no fue la excepción.

La reina pasó su cumpleaños con su amiga Ángela Kelly, ya que no podía recibir a nadie más

Dio una entrevista a Hoda Kotb, la presentadora del programa Today de la cadena estadounidense NBC para hablar de los Juegos, donde también contestó preguntas sobre la visita a la reina y la relación con su familia. Y sus respuestas fueron muy desafortunadas.

Incluso en algunos casos, incoherentes. Empezó por quitarle importancia al cumpleaños de la reina sugiriendo que después de 96 años estaría aburrida de los festejos pero, ante la repregunta de Kotb, aclaró que seguramente iba a estar feliz con las celebraciones del Jubileo de Diamantes. ¡Cómo se nota que es joven! Nada más reconfortante que brindar cuando uno llega con buena salud a edad avanzada.

“Siempre tiene un gran sentido del humor conmigo y solo me aseguro de que esté protegida y tenga a las personas adecuadas a su alrededor. Tanto Meghan como yo tomamos el té con ella, así que fue muy agradable ponernos al día. Tenemos una relación muy especial, hablamos de cosas de las que ella no puede hablar con nadie más”, contestó Harry cuando le preguntaron cómo había sido el encuentro con su abuela. Y esa simple frase hizo estallar a la prensa inglesa y hasta Boris Johnson tuvo que salir a aclarar que la seguridad de la reina estaba garantizada.

Los observadores reales lo crucificaron. ¿Cómo podía cuestionar este mocoso (que solo vio a la reina una vez por año en los últimos tiempos, que vive a 10.000 kilómetros y no tiene ni idea de la rutina de la Casa Real), a los guardias, al fiel secretario y a las damas de compañía? ¿Cómo puede suponer que él y su esposa, a la que apenas conoce, son mejores confidentes que los hijos y nietos que viven en Londres? Solo la fantasía de una personalidad narcisista en extremo puede pensar algo así.

Ronnie Wood muestra el retrato de la reina realizado por él

No podía faltar la mención a la princesa Diana. Así que cuando Hoda Kobt le preguntó sobre si sentía la presencia de su madre Harry contestó muy suelto de cuerpo: “Es casi como si ella ya hubiera puesto su granito de arena con mi hermano y ahora me ayudara a mí. Siento su presencia en casi todo lo que hago, pero definitivamente en los últimos dos años más que antes”. Egoísta es lo menos que le dijeron los periodistas. Hasta los espíritus parece querer acaparar. Y pobre Diana… porque aunque Harry crea que con esta actitud beligerante hacia su familia la está vengando, debería darse cuenta lo equivocado que está. Diana sufriría horrores con el distanciamiento cada vez más patente entre sus hijos. Y el reportaje lo terminó diciendo que su mantra es construir un lugar mejor para sus hijos y que por ese motivo no se puede dar el lujo de estar agotado ni siquiera un día.

La compañía Mattel le obsequió a la reina una Barbie a su imagen y semejanza

Los expertos reales dicen que este reportaje tan autorreferencial tiene como objetivo juntar material para el documental que está filmando Netflix y cuyas cámaras lo siguen a todos los viajes. Y de paso también ir preparando el terreno para la promoción de su autobiografía.

Como hipócrita, inconsciente, desvergonzado, vengativo, absurdo lo calificaron los medios. E incluso opinaron que detrás de esa fachada hay un hombre profundamente infeliz.

La respuesta de la reina no se hizo esperar: salió con pañuelo en la cabeza, lápiz labial sentador y sonrisa encantadora a pasear por los jardines del palacio y a supervisar sus caballos. Además hizo saber que había invitado especialmente a los duques de Sussex y a sus niños a que la acompañen en el balcón de Buckingham el día en que se celebre oficialmente su cumpleaños. ¡Cuánta sabiduría y humildad ante semejante arrogancia!

Solo nos resta desear a Su Majestad muchos años más con salud y prosperidad y esperar los festejos de mayo y junio que prometen ser brillantes.

Harry en la entrevista a Today / captura de TV