Gimnasia: en año electoral la economía es la preocupación más grande

Cuando el 3 de marzo de 2017 una asamblea histórica y multitudinaria respaldó a la Comisión Directiva de Gabriel Pellegrino en la decisión de concursar el club, seguramente todos los presentes soñaron con una deuda saldada en pocos años. El pasado 26 de mayo (5 años después) la institución pagó la segunda y última cuota del acuerdo homologado. ¿Asunto terminado? Nada de eso. En los últimos tiempos nuevamente la palabra deuda se ha instalado en las charlas de los triperos. Hoy, las preguntas de los socios con participación política de cara a las elecciones de noviembre se hacen una pregunta con difícil respuesta: ¿Cuánto debe Gimnasia?

Lo concreto es que en el tramo final de la gestión que finaliza en el próximo mes de noviembre parecen haber vuelto los problemas de liquidez para el funcionamiento diario. Así, desde hace varios meses hay reclamos constantes de los empleados enrolados en el gremio Utedyc que apuntan a tardanzas y desdoblamiento en el pago de sueldos. El último reclamo fue la semana pasada por atraso en el pago de salario y aguinaldo, los cuales fueron abonados parcialmente el pasado lunes.

Por otro lado, en junio hubo un amago del plantel de no concentrar para el partido con Patronato. La intención de llevar a cabo la medida, (finalmente abortada) había provocado enojos en la dirigencia. La sangre no llegó al río. “Le dijimos a la gente de la Comisión que no queremos que el club se endeude”, dijo Néstor Gorosito la semana pasada en conferencia de prensa acerca de la ausencia de refuerzos. El razonamiento es lógico, no generar gastos que luego impliquen complicaciones a la hora de afrontar los pagos al plantel actual. “Nosotros estamos prácticamente al día”, agregó Pipo.

Con el frente interno solucionado, el Lobo debe afrontar deudas de pasados mercados de pases. Brahian Alemán fue vendido en 2018 a Al Ettifaq en un millón y medio de dólares y fue recomprado un año después en U$S 1.200.000. Tres años después, por la deuda de 350 mil dólares el club saudí intimó a Gimnasia en febrero por lo que desde abril estuvo inhibido para reforzarse. Hoy, hay un acuerdo de partes según el cual habría que saldar la totalidad de la deuda en menos de 90 días.

Por Ramón Sosa, Olimpia hizo una presentación ante la FIFA que obviamente obliga a Gimnasia a pagar los 550 mil dólares que debe de la primera cuota del pase del paraguayo (vencida en enero de este año), más punitorios. Deberá pagar 650 mil dólares antes de fin de año para poder reforzarse en el próximo mercado y no quedar inhibido. Pero atención, más allá del reclamo al club paraguayo se le adeuda el resto del pase de Sosa, otros 750 mil dólares.

Además Gimnasia se encuentra inhibido por orden judicial en una causa que le inició el empresario Diego Cativa, quien participó como intermediario en la llegada del paraguayo Víctor Ayala al club. La medida cautelar “impide al club disponer de la venta de jugadores o patrimonio de la institución hasta tanto salde la deuda reclamada de U$S 110.000, deuda del 2019/20 más intereses, costas y honorarios”. Como el embargo es sobre una cuenta bancaria y la Justicia autoriza el pago de sueldos con la misma, ese embargo es por ahora abstracto. Al no haber vendido Gimnasia a Johan Carbonero, el impedimento de venta también cayó en saco roto.

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Justamente la situación planteada con el colombiano fue todo un tema en el último mes. Gimnasia lo había “comprado” en 2.300.000 dólares por el 70% del pase, pagó 700 mil y por los sucesivos incumplimientos primero perdió el 20% de la ficha y luego terminó devolviendo el pase a cambio de un resarcimiento económico. Gimnasia recibió solamente U$S 500 mil de Once Caldas de un negocio global que en Avellaneda dicen fue de 3.800.000 mil dólares. El Lobo fue a pérdida y la participación de Carbonero en la Copa de la Liga y las primeras fechas de este torneo costó 200 mil verdes.

Por estas horas, los abogados mens sana rechazaron un reclamo de la AFIP que reclama aportes previsionales por una suma de 28 millones de pesos que - enmarcados en el decreto 1212- deben ser pagados por un fondo que abona la AFA y los clubes deben cumplir con la declaración jurada, cosa que Gimnasia ha hecho. No es una deuda del club.

También están los reclamos de All Boys de La Pampa por el pase del “Pampa” Sosa y del grupo Issa - Simón por Andrés Guglielminpietro. En el juicio por Sosa, en su momento el club pampeano no había presentado documentación, hubo una reunión el miércoles y “no se ha llegado a ningún tipo de acuerdo” según consta en el expediente. El juicio Issa - Simón (por la venta doble del jugador, al grupo y luego a Italia) sí es una preocupación para todo Gimnasia y excederá este mandato.