Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí

Enviar Sugerencia
Conectarse a través de Whatsapp
Temas del día:
Buscar
Séptimo Día |LITERATURA PARA COLECCIONAR

La Antártida desde la épica, la ciencia y la política

A quince años del discutido registro de -93,2°C en el continente blanco —lo que fue una de las temperaturas más bajas de la historia—, un recorrido por los textos que lo exploran

La Antártida desde la épica, la ciencia y la política

El continente blanco, uno de los que más incógnitas genera en la ciencia mundial / Web

10 de Agosto de 2025 | 04:13
Edición impresa

En un rincón remoto de la Antártida oriental, el planeta alcanzaba, hace 15 años, una nueva marca extrema: -93,2 °C, la temperatura más baja jamás registrada en la Tierra. El hallazgo (en la estación Vostok, una estación de investigación rusa ubicada en el interior del continente), obtenido a través de datos satelitales de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), corresponde a un día como hoy —10 agosto— pero de 2010.

Aquel descubrimiento fue confirmado por el científico Ted Scambos, del Centro Nacional de Datos sobre Nieve y Hielo en Boulder (Colorado, Estados Unidos), durante una reunión científica en San Francisco. Aunque ese frío récord no figure en el Libro Guinness por no haber sido medido con termómetros convencionales, el dato asombra por lo cercano que está a lo que podría esperarse “en Marte durante un agradable día de verano en los polos”, según Scambos.

Este tipo de registros no sólo sorprenden por su brutalidad térmica, sino también por lo poco que se conoce de estas regiones tan inhóspitas. Para sobrevivir a esas condiciones, los científicos que trabajan en el Polo Sur deben utilizar respiradores que entibian el aire antes de que entre en sus pulmones. De hecho, algunos se aventuran a correr brevemente sin protección en temperaturas cercanas a los -73 °C como desafío físico extremo, aunque solo pueden hacerlo durante unos pocos minutos.

Tanto Scambos como Waleed Abdalati, otro experto en hielo y excientífico jefe de la NASA, advirtieron que este tipo de lecturas podrían ser fenómenos aislados en lugares escasamente medidos, donde las condiciones podrían haber sido incluso más severas sin que se sepa. Estos datos no sólo desafían nuestra comprensión del clima extremo, sino que también revelan lo mucho que aún ignoramos sobre la diversidad y los límites de nuestro propio planeta.

OCHO LIBROS SOBRE EL CONTINENTE BLANCO

La figura del irlandés Ernest Shackleton es quizás uno de los pilares más legendarios de la narrativa polar, y el libro Atrapados en el hielo, de Caroline Alexander, rescata con meticulosidad la dramática aventura de la expedición a bordo del Endurance en 1914. Shackleton, que soñaba con ser el primero en cruzar la Antártida de mar a mar, se enfrentó a un desastre monumental: su barco quedó atrapado en la banquisa antes incluso de tocar tierra firme. Alexander construye el relato con base en los diarios personales de la tripulación y las impactantes fotografías del expedicionario Frank Hurley, conformando una narración casi clínica de los hechos, que expone sin ornamentaciones la crudeza del hielo, la entereza de los hombres y la lucha titánica contra un destino adverso. Es una obra rigurosa, rica en imágenes y documentos, que logra mantener viva una de las epopeyas más conmovedoras del siglo XX.

Mientras tanto, Antártida. Descubriendo el último continente, de Sebastián Arrebola y Shoshanah Jacobs, propone una mirada más didáctica y visual. Con un prólogo a cargo de Pierre Yves Cousteau, hijo del célebre Jacques Cousteau, el libro combina más de 200 fotografías y 50 mapas a todo color, convirtiéndose en una obra de referencia accesible para el público general. La geografía, los ecosistemas, la fauna y la historia de los descubrimientos son abordados desde una perspectiva amable, casi museográfica, auspiciada por instituciones como Cousteau Divers y el Museo Marítimo de Ushuaia. Es un texto ideal para introducirse en el conocimiento antártico sin necesidad de especialización previa, pero con la promesa de una riqueza visual que estimula la curiosidad.

 

Este récord no figura en Guinness por no haberse medido de forma convencional

 

Desde otro ángulo, el de las normativas y los compromisos legales en torno al continente, Santiago G. de la Vega escribe Antártida. Las leyes entre la costa y el mar, un libro que logra explicar, con claridad y estilo coloquial, la complejidad de la actividad científica argentina y los marcos de cooperación internacional que regulan la presencia humana en la zona. El texto no se detiene sólo en lo jurídico, sino que abre un panorama amplio sobre los temas que hoy atraviesan el quehacer antártico: desde la logística hasta el cambio climático, pasando por el impacto geopolítico de las investigaciones. Con una vocación pedagógica, el autor pone en valor la importancia estratégica de la región y el papel que cumple la Argentina en su desarrollo sostenible.

OTRAS PERSPECTIVAS DE LA ANTÁRTIDA

La perspectiva histórica aparece con vigor en Antártida. Más allá del fin del mundo, de Ricardo Capdevila, curador del Museo del Instituto Antártico Argentino hasta su fallecimiento en 2008. Capdevila expone con precisión relatos de exploraciones y gestas poco conocidas, que revelan hasta qué punto la lucha por conquistar el continente blanco ha sido también una odisea psíquica y física. El libro destaca por su habilidad para rescatar momentos que parecen ficción, pero que son proezas reales protagonizadas por equipos humanos que, sin perder su individualidad, llevaron la cooperación al límite. Hay en sus páginas una recuperación del espíritu pionero de quienes enfrentaron la Antártida sin certezas ni mapas, motivados sólo por la voluntad de llegar más lejos que nadie.

Contraponiéndose a la idea de un continente muerto y estático, David Campbell escribe El desierto de cristal, una obra que desplaza el foco hacia la vida oculta bajo la aparente inercia del hielo. Lejos de las narrativas épicas, Campbell se dedica a describir la profusión de biodiversidad que habita la península antártica, con especial atención a los ecosistemas marinos y su relación con los efectos del cambio climático. El libro se convierte así en una invitación a mirar de otra forma un territorio usualmente reducido a cifras de temperatura y kilómetros de soledad: aquí, la Antártida respira, se adapta y muta.

La historia argentina en la región tiene un nombre propio: Hernán Pujato. Hernán Pujato. El conquistador del desierto blanco, de Susana Rigoz, es una biografía que recupera la vida y la obra del general que encabezó las primeras campañas nacionales para fundar bases permanentes en el continente. La autora narra la entrega de un hombre convencido de que el destino argentino estaba ligado a su presencia en el sur más extremo, y recupera también las historias de muchos otros pioneros que lo acompañaron en esa empresa monumental. El libro es también un recordatorio de que la Antártida no sólo ha sido un sueño de países lejanos: fue, y sigue siendo, parte del proyecto nacional argentino.

SUPERVIVENCIA Y PODER MUNDIAL

De supervivencia se trata también La prisión de hielo, de Jerri Nielsen, pero con un giro contemporáneo e íntimo. En 1999, durante el invierno más crudo, Nielsen —única médica en una base polar— descubre un bulto en su pecho. Aislada del mundo, sin posibilidad de evacuación inmediata, decide operarse a sí misma y comenzar un tratamiento de quimioterapia con insumos arrojados desde el aire. La historia real fue noticia internacional, y el libro la recrea en primera persona con una mezcla de angustia, valentía y reflexión que escapa al dramatismo superficial. Es un testimonio de fortaleza, pero también una advertencia sobre la soledad extrema en condiciones de aislamiento absoluto.

 

Aseguran que esa temperatura sería “un agradable día de verano en los polos de Marte”

 

Por último, La pugna antártica, de Pablo Fontana, repone el tablero diplomático en el que se definieron las reglas del juego durante el siglo XX. Desde la antesala de la Segunda Guerra Mundial hasta la firma del Tratado Antártico en 1959, el libro expone las tensiones entre países, los reclamos territoriales y la construcción de un marco jurídico que aún hoy regula el uso pacífico y científico de la región. Fontana ofrece una mirada estratégica sobre un período clave en la historia global, donde la Antártida dejó de ser sólo un desierto helado para convertirse en un espacio disputado por su valor simbólico, geopolítico y ambiental.

Antártida, más allá del fin del mundo
RICARDO CAPDEVILA
Editorial: Zagier & Urruty
Páginas: 128
Precio: $20.930
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE a esta promo especial

ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES

HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS

Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales

¿Ya tiene suscripción? Ingresar

Full Promocional mensual

$670/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $6280

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Acceso a la versión PDF

Beneficios Club El Día

Suscribirme

Básico Promocional mensual

$515/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $4065

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Suscribirme
Ver todos los planes Ir al Inicio
cargando...
Básico Promocional mensual
Acceso ilimitado a www.eldia.com
$515.-

POR MES*

*Costo por 3 meses. Luego $4065.-/mes
Mustang Cloud - CMS para portales de noticias

Para ver nuestro sitio correctamente gire la pantalla