Nedela sigue achicando la planta política y elimina cuatro direcciones

La necesidad de hacer frente a crisis financiera del municipio y la decisión de seguir pautas para el achique del gasto político que le marcó la gobernadora María Eugenia Vidal a los intendentes llevaron en las últimas horas al berissense Jorge Nedela a producir un nuevo recorte de funcionarios a través de la eliminación de cuatro direcciones.

Según se indicó, en el marco de la reestructuración encarada para afrontar la crítica situación económica por la que atraviesa la vecina comuna, Nedela firmó ayer un decreto por el que se suprimen cuatro direcciones del andamiaje municipal y que, se adelantó, quedarán bajo la órbita de otras áreas afines.

“Bajo la necesidad de optimizar la organización funcional del Municipio, se procedió a efectuar estos cambios en el Organigrama Municipal y de esta manera se suprimen la Dirección de Fiscalización, la Dirección de Finanzas, la Dirección de SICAM y la Dirección de Control de Gestión y Modernización del Estado”, se señaló desde el vecino municipio.

RECORTE

En ese contexto, Nedela decidió que las direcciones de Fiscalización que en su momento estuvo a cargo de Leandro Khidir, (hoy responsable de la Dirección de Ingresos Públicos) y la de Finanzas que estuvo bajo el manejo de Hernán Cassinelli, sean absorbidas por las direcciones existentes en la Secretaría de Economía.

Del mismo modo se informó que se suprime la Dirección de SICAM, la que durante la actual gestión no estuvo a cargo de ningún funcionario y pasó a ser responsabilidad de la Dirección de Personal.

Continuando con la reestructuración, se decidió dejar sin efecto a la Dirección de Control de Gestión y Modernización del Estado, la que pasó a ser atendida directamente por la Jefatura de Gabinete. Cabe recordar que esa dependencia estuvo conducida por Matías Nanni, quien desde el 11 de diciembre asumió su banca como concejal de la ciudad.

Como se ha informado, Berisso atraviesa una difícil situación financiera que en los últimos meses lo ha llevado a tener serios problemas para pagar los salarios en tiempo, situación que derivó en una marcha y paro de los municipales.

En estos días, la comuna a cargo del radical en Cambiemos Jorge Nedela debe reunir alrederdor de $ 40 millones para el pago de los sueldos y cerca de $ 20 millones para aguinaldos.

Fuentes comunales indicaron que “se trabaja contra reloj” para poder reunir esos fondos y evitar así un nuevo conflicto con el gremio.