Una ong ambientalista se mete en la discusión por la obra del paso bajo a nivel de 1 y 32

El grupo de vecinos, profesionales y comerciantes que rechaza la construcción de un paso bajo nivel en 1y 32, y propone modos alternativos de ingreso al casco fundacional para los rieles del ferrocarril Roca en su flamante versión eléctrica, sumó ayer voces de apoyo. Desde la ONG regional Nuevo Ambiente se pidió la suspensión del inicio de las obras, “hasta que se evalúen otras opciones”.

La entidad, que también ve con buenos ojos la convocatoria a una consulta popular, planteó un párate para la mega-intervención urbana “por tiempo indeterminado”, al considerar que de iniciarse “se cancela indefectiblemente la posibilidad de plantear mejores soluciones a la problemática del ingreso del tren a la ciudad, y se anula la posibilidad de generar mejoras en la relación de los diferentes sistemas de movilidad urbana que tiene actualmente nuestra región”.

Mediante un comunicado cuyo contenido se conoció en las últimas obras, la entidad sostiene que “ante los trascendidos acerca del pronto inicio de las obras para la construcción del paso bajo nivel en el cruce de las avenidas 1 y 32, la Asociación Civil Nuevo Ambiente solicitó al Ejecutivo municipal y al Concejo Deliberante que intercedan para suspenderlas, con el objeto de analizar otras alternativas y la posibilidad de convocar a una consulta pública para conocer la opinión de los platenses”.

En la cartera de Transporte afirman que la obra en 1 y 32 arrancará “antes de fin de año”

En la ONG creen que una consulta pública sería útil para hallar “soluciones más integrales que contemplen acciones futuras, que puedan mejorar la calidad de vida de los vecinos de la zona y generen un desarrollo más adecuado de la ciudad en su conjunto”.

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Uno de los argumentos esbozados por Nuevo Ambiente para reclamar la postergación sin fecha del proyecto elaborado por una unidad de la facultad de Ingeniería local, y avalado por la cartera nacional de Transporte, es “el desconocimiento de sus implicancias, es decir los problemas y las consecuencias que esto acarrea desde el punto de vista urbanístico”.

A tono con los autoconvocados, se expresa que la entrada de los trenes a cota cero, tal como está planteada, “deja definitivamente de lado la posibilidad de integración entre los barrios a uno y otro lado de las vías” y “genera complicaciones en relación a servicios públicos ligados a aspectos de seguridad, salud y educación”.

Para la entidad, la realización de la obra impactaría en distintos aspectos ambientales, como “la extracción de numerosos ejemplares arbóreos añosos en la zona” y “la pérdida de centenares de metros cuadrados de espacio público”. En la organización, advirtieron además “la poca difusión que se le dio al tema, siendo una obra de semejante magnitud”.