Varias miradas para hoy: la cantidad de votantes, Buenos Aires y otras

Hoy se terminan las especulaciones, y los presidenciables de los diferentes espacios políticos salen a la cancha para legitimar sus títulos.

Desde el regreso de la democracia, en 1983, los candidatos a gobernador de los presidentes electos ganaron en la provincia de Buenos Aires. Incluso Ruckauf, que obtuvo la gobernación por una alquimia electoral que le permitió sumar los votos de la Alianza Republicana de Domingo Cavallo y la UCeDE para llegar a sede de la calle 6, perdió con su partido -el PJ- frente a Graciela Fernández Meijide por 48,34% a 41,34%.

En 2015 Macri (34,15%) fue el único presidente que cayó en la provincia de Buenos Aires con Scioli (37,15%). Sin embargo, su candidata a gobernadora, María Eugenia Vidal, resultó electa gobernadora. al vencer por 39,42% a 35,28% al candidato del Frente para la victoria, Aníbal Fernández.

Según la Cámara Nacional Electoral, desde que se inauguraron las PASO en la Argentina la participación electoral fue decayendo. En 2011 alcanzó el 78,6%; en 2013, fue de 75,0%; en 2015 el 74,9% y en 2017, el 72,4%.

En cambio en las elecciones generales, acudió más gente a las urnas en las elecciones presidenciales que en las de medio término. Así, en las presidenciales de 2011 alcanzó el 79,4% y en la de 2015 el 81,1%. En tanto en las legislativas de 2013 y 2017 llegó a 77,2% y 76.1% respectivamente.

La participación electoral es un dato que toman muy en cuenta en Juntos para el Cambio. Creen que, como ocurrió en 2015, si va más gente a votar tienen más posibilidades en las urnas frente al peronismo.

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Córdoba es otro distrito decisivo a la hora de mirar los comicios de hoy, y que Alberto Fernández y Mauricio Macri recorrieron varias veces. En las cuatro elecciones presidenciales que se sucedieron desde 2003, el kirchnerismo solo ganó en 2011 cuando Cristina Kirchner venció por 37,29% a Hermes Binner (23,39%) y Ricardo Alfonsín (18%). Pero unificando los votos de estos dos candidatos, sumaron 41,39%) lo que implica que la mayoría de los cordobeses se inclinaron por candidatos alternativos al kirchnerismo.

Una de las razones por las que Mauricio Macri sustentó su triunfo en Córdoba y en las presidenciales de 2015, fue la amplia ventaja que sacó en el balotaje frente a Daniel Scioli: 71,52% a 28,48%. Cuanto más reduzca Alberto Fernández esa diferencia, mayor serán sus posibilidades hoy.

Hay que remontarse a 1999 para encontrar una comparación histórica con la actual polarización que existe entre las principales fuerzas políticas. En ese momento, De la Rúa y Duhalde sumaron más del 86% de los sufragios.

La fuerte polarización que exhibe esta elección, perjudica sin dudas a las terceras opciones electorales, como la que representan las fórmulas de Roberto Lavagna con Juan Manuel Urtubey y José Luis Espert con Luis Rosales. Se verá hoy cuál es el caudal electoral real de ambos al final del día.

También se sabrá hoy si algunas de las fórmulas con menor caudal electoral -como las que encabezan Alejandro Biondini, Antonio Romero Feris o Raúl Albarracín- alcanzan el 1,5% de los sufragios necesarios para poder competir en octubre próximo.