Una pelea en Bariloche renovó la rivalidad entre los alumnos del Nacional y del Liceo

La antigua “pica” Colegio Nacional - Liceo Víctor Mercante tuvo una nueva expresión en Bariloche, donde dos divisiones del último año de los secundarios de la Universidad que cumplían en la ciudad rionegrina el tradicional viaje de egresados protagonizaron una pelea que terminó con un estudiante lastimado y la abrupta vuelta “a casa” de ambos cursos.

Hacía tiempo que no se producían este tipo de incidentes con estudiantes platenses en Bariloche, después de largos años en que algún colegio local era mencionado por problemas ocasionados por sus egresados.

Ahora, todo habría comenzado con una pelea en un conocido boliche de la ciudad turística al cual, promoción tras promoción, visitan los egresados desde hace décadas. La gresca continuó luego en el hall del hotel donde uno de los grupos de estudiantes se hospedaban.

Las primeras trompadas se propinaron en el boliche, pero luego la gresca continuó en el hotel y ahí, entre piña y piña, uno de los adolescentes dio su cara contra un vidrio y se cortó un labio.

Un tuit de una usuaria que aseguró ser alumna del Nacional, publicado en las últimas horas, confirmaría la versión de la pelea: “Finalizamos Bariloche con la cagada a palos del Nacional y el Liceo, dios son unos monos. Cantamos la canción para joder no para tomarlo en serio che”, escribió. Y luego tuiteó: “Y para colmo ahora nos están apurando para irnos a La Plata, bancá que hay gente no tuvo nada que ver coordinador gil”.

En La Plata, existe una vieja rivalidad entre alumnos de ambos colegios pertenecientes a la Universidad Nacional de La Plata. Incluso oficialmente se han realizado encuentros entre ambas instituciones para romper con esa barrera. Pero parece que este año en Bariloche volvió a aflorar la antigua competencia y después de las primeras palabras subidas de tono le siguió una disputa ya con la participación de los golpes y empujones.

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El DIA habló con Marcelo Martín, el padre de los alumnos del Colegio Nacional que viajó como acompañante. “Los chicos convivieron una semana en ese hotel sin ningún problema, más allá de las típicas cargadas o cantitos habituales”, dijo.

El padre dio detalles y aclaró los hechos: “Nosotros emprendíamos el viaje de regreso en la mañana de ayer -por anteayer-. Al regresar del boliche, pasábamos por el hotel a cargar el equipaje y luego salir hacia La Plata. Al llegar al hotel, hubo un encontronazo entre los chicos con algunos empujones pero que no pasó de ahí”.

Martín prosiguió: “Sucedió que uno de los chicos se golpeó contra un vidrio de una cartelera que está en el hall de ingreso del hotel y ahí se lastimó el labio. No fue nada grave, yo mismo lo acompañé hasta un hospital para que lo atiendan”.

A su vez, Martín se mostró molesto por la actitud que quisieron tomar las autoridades del hotel Aguas de Sur. “Nos querían cobrar 18 mil pesos por el daño del vidrio. Como yo soy productor de seguros, me avivé y me di cuenta que era una locura. Primero averigüé en ese momento en una vidriería de Bariloche y valía poco más de un tercio de ese monto. Y finalmente el seguro del hotel era quien se debía hacer cargo del costo. A lo que voy también, es al aprovechamiento que hay a veces con los chicos que viajan”.

Prácticas de convivencia

Como se dijo, la rivalidad entre los alumnos del Nacional y los que concurren al Liceo es histórica, con episodios producidos, por lo general, al celebrarse el Día del Estudiante. Para terminar con ese tipo de disputas, hace unos años, la Prosecretaría de la Universidad, que atiende los asuntos de los colegios de pregrado instrumento hace unos años un plan de prácticas de convivencia para mejorar la relación entre los alumnos de los distintos colegios, con jornadas en las que participan chicos de 6º grado de la Escuela Anexa y de los primeros años de los establecimientos secundarios.