Gritos, 8 ladrones encapuchados y terror: fingen un allanamiento para copar una casa en La Plata

Pese a que hace pocas semanas se resolvió poner en marcha de una nueva unidad policial, que específicamente se iba a encargar de prevenir episodios de inseguridad en la Zona Oeste de la Ciudad, la realidad supera a cualquier anuncio. Tanto que una pareja de Lisandro Olmos acaba de vivir una verdadera pesadilla en su domicilio de calle 46 entre 201 y 202.

De acuerdo a lo que pudo saber este diario de fuentes del caso, ocho delincuentes, que tenían guantes y los rostros cubiertos, usaron un ariete para tumbar la puerta de entrada y, así ganar el interior de la propiedad, en medio de una serie de gritos ensordecedores.

Moviéndose como una verdadera banda, con roles bien diferenciados según la posición dentro de la estructura criminal, los asaltantes se hicieron amos y señores de la situación.

“Lo del allanamiento fue una pantalla para el afuera”, indicó un pesquisa ante una consulta de este medio.

“Si alguien escuchaba algo, al menos iban a tener el tiempo que necesitaban para su incursión”, especuló el mismo vocero.

Se supo que las víctimas fueron un comerciante y una peluquera, que se quedaron paralizados del miedo.

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Por si hacía falta algo, los intrusos estaban armados y se mostraron dispuestos a lo peor. Por eso no dudaron en lanzar todo tipo de amenazas.

Obviamente, querían la plata grande y, para infundir aún mayor temor, los inmovilizaron atándolos por sus muñecas.

Así pudieron ponerse a revolver el interior de la finca, que era la segunda parte del plan.

De acuerdo a los datos brindados por los informantes, los delincuentes se alzaron con una cantidad de dinero que no trascendió, una camioneta Toyota Hilux y un Volkswagen Voyage.

La fuga tomó una dirección desconocida, al menos hasta el momento.

Se dijo que los damnificados no acusaron lesiones y no pidieron ningún tipo de asistencia médica

El ariete empleado para vulnerar el acceso al inmueble quedó tirado en el lugar, por lo que fue secuestrado con fines periciales.

La idea es someterlo a distintas técnicas de laboratorio para saber si pudieron quedar huellas dactilares de alguno de los ladrones que la manipularon.

La causa, por “robo agravado”, tramita en la seccional decimoquinta de La Plata, con conocimiento de la UFI Nº 9, que ya impartió distintas directivas para la recopilación probatoria, fundamentalmente los relevamientos de cámaras de seguridad y testigos.

El ataque ocurrió cerca de las 21.30, al amparo de la nocturnidad. Igualmente, se espera que algún equipo domiciliario haya captado imágenes de interés identificatorio.

Como se dijo, a mediados de este mes y, en medio de una ola de inseguridad que va en aumento, el Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires decidió crear un “subcomando” para reforzar los patrullajes en la Zona Oeste, una de las más castigadas por los delincuentes.

Con cinco nuevos patrulleros que comenzaron a recorrer las áreas donde se registra un mayor número de ataques delictivos, el nuevo grupo de agentes quedó a cargo de las cinco áreas, que venía recorriendo la Patrulla Rural.

Además, hubo una mayor dotación de efectivos para llevar adelante los rondines.

De todas formas, a la luz de los acontecimientos recientes, las soluciones no aparecen.

Prueba de ello, también fue el brutal robo ocurrido en Abasto, ya que si bien los dueños de la casa saqueada no se encontraban cuando irrumpieron los ladrones, el que sufrió la bestialidad de los ladrones, fue el perro de la familia, al que le pegaron un palazo en la cabeza.

Pasó en 511 y 221, donde encontraron al animal con la cabeza lastimada.

Adentro todo era un desastre. Ambientes revueltos y colapsados, más un faltante de distintos elementos de valor. Entre ellos se informó de unos 600 mil pesos y joyas.

La víctima, 46 años, de profesión kinesiólogo, también contó que varios objetos fueron destrozados y que los implicados los “dejaron tirados en el piso”.

De esta forma, ya notificados por este episodio delictivo que alteró los ánimos en Abasto, las autoridades policiales se encuentran abocados al esclarecimiento del caso.