Dólares en baja, brecha del 1% y riesgo debajo de 700

Después de semanas de altísima volatilidad, con gran tensión y títulos argentinos en una montaña rusa, el cierre de la semana se convirtió en una suerte de mar de calma. Casi todo funcionó de manera adecuada: los dólares (oficiales y libres) bajaron, la brecha cambiaria se redujo al 1%, el Banco Central (BCRA) sumó reservas, los bonos subieron y el riesgo país volvió a estar por debajo de los 700 puntos básicos, algo que no lograba desde la primera semana de marzo. Lo único que sigue sin levantar cabeza es la Bolsa de Buenos Aires, que tuvo pocos negocios, con los ADR argentinos en Nueva York anotando también mayoría de bajas.

Si no fuera por el nuevo e inesperado ataque de Vladimir Putin a Kiev, provocando muertos y numerosos heridos, o por los enfrentamientos entre fuerzas de la India y Pakistán por el atentado en la región de Cachemira, también con muertos (y con movilizaciones en Nueva Delhi e Islamabad, con el agravante que ambos países tienen armas nucleares), puede decirse que los mercados internacionales también tuvieron cierta calma, con señales de que hay conversaciones entre EE UU y China para buscar un acercamiento comercial, ya sin Donald Trump ladrando contra el titular de la Reserva Federal Jerome Powell.

La licitación de deuda

En Buenos Aires esta particular tranquilidad se dio después de que el jueves se realizara una licitación de deuda en pesos que no alcanzó los objetivos: vencían $7,5 billones y Economía pudo colocar títulos por $5,2 billones. Esa diferencia de $2,3 billones (equivalentes a US$ 1.877 millones) fue cubierta de una manera un tanto contable, con ganancias que tuvo el BCRA en su balance de 2024. La autoridad monetaria ganó $19,4 billones el año pasado y le giró al Tesoro $11,7 billones para que tenga los fondos necesarios para seguir completando lo que no se cubra en las licitaciones de deuda en pesos (en los últimos seis llamados la oferta no llegó a cubrir todo lo que vencía).

Pero a pesar de esa luz amarilla, el mercado local funcionó casi como un relojito, con dólar muy tranquilo, buscando su nivel de flotación, pero con miembros del equipo económico reuniéndose con representantes del campo y reiterándoles que liquiden operaciones ahora, ya que a fines de junio termina la baja de retenciones autorizada en enero de este año, tal como adelantó el presidente Milei hace unos días.

Acercamiento clave

El virtual acercamiento entre Washington y Beijing tranquilizó las aguas. Volvió a subir el valor de los bonos norteamericanos y sigue el descenso de las tasas largas de EE UU: se pagó 4% anual a 1 año de plazo, 3,9% anual a 5 años, 4,2% anual a 10 años y 4,7% anual a 30 años. Y, con eso, en el exterior el dólar subió 0,6% en Japón y 0,1% contra el euro, la libra y el chileno, no cambió contra el franco suizo y el yuan, y bajó 0,1% en Brasil y 0,3% en México.

A nivel local, con el dólar exportador a $1.193,62, el BCRA no intervino en el mercado y, al final del día, la autoridad monetaria logró sumar reservas por US$ 89 millones, que son más que nada vinculadas a operaciones de comercio exterior, pero no todavía a liquidaciones del campo, que siguen renuentes a vender con los precios actuales.

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El dólar

Conocido el abastecimiento de pesos del BCRA al Tesoro para que cubra las licitaciones que vienen, y con más dólares en las reservas, el dólar blue bajó $15 hasta $1.210, el Senebi bajó $1,60 hasta $1.200,37, el MEP bajó $2,24 hasta $1.182,59 y el contado con liqui bajó $1,90 hasta $1.198,97. Por lo que la brecha entre el oficial y el blue fue del 1% y la del CCL con el mayorista fue del 2%, algo que no pasaba desde principios de diciembre, antes de que Milei se metiera en el escándalo $LIBRA y en su raro discurso en Davos.

El grueso del dinero que se colocó en la licitación del jueves fue en bonos en pesos a tasa fija, que pagan entre 36,7% y 38,1% anual, con vencimientos antes de la elección de medio término en octubre.

Al mismo tiempo, continúan creciendo los depósitos en los bancos, de pesos y de dólares, y con esa corriente se dio vuelta la dirección de las tasas de interés: de pagarse por los plazos fijos entre 33% y 39% anual (según la cantidad de dinero que se pone en juego) el viernes se terminó pagando entre 32% y 35%, lo cual hace más desafiante tentarse con hacer carry trade hasta agosto, tal como recomendó JP Morgan, que supuestamente espera una dolarización antes de la elección, como en general sucede en la Argentina.

Y la orientación de los bancos de inversión se va dando vuelta en más protagonistas. Esta vez fue Bank of América, que hasta hace poco tiempo preveía un salto del dólar, pero ahora cambió su proyección tras la salida del cepo y les dijo a sus clientes: “Compren pesos”. Y en línea con eso, con pocos negocios, los bonos argentinos subieron 0,3% y el riesgo país bajó 21 unidades, hasta 692 puntos básicos (un nivel que no se veía desde la primera semana de marzo).

En papeles privados, la tensión en Ucrania y en Cachemira no movió el amperímetro y hubo otra rueda en verde en la Bolsa de Nueva York, con alza del 0,1% para el Dow, mejora del 0,7% para el S&P y avance del 1,3% para el Nasdaq, impulsado sobre todo por un fuerte aumento en Tesla y también con buen día para Alphabet (Google) por la llegada de un buen balance. Mientras que hubo una suba del 0,1% en la Bolsa de San Pablo y una mejora del 0,6% en la Bolsa de México.

Lo que volvió a fallar fue el mercado bursátil local. Tras la suba gigantesca del año pasado, continúa la depuración. Con $64.085 millones operados en acciones y $100.499 millones en Cedears, la Bolsa de Buenos Aires bajó 0,3%. Con los ADR argentinos anotando bajas del 1% al 4,5% para Telecom, TGS, Bioceres, Central Puerto IRSA y Loma Negra.

Finalmente, en commodities hubo valores en el sube y baja. El petróleo tuvo un alza del 1%. Los metales preciosos y básicos estuvieron en descenso. En Chicago fue un buen día para el maíz y el trigo, pero no para la soja. En Rosario, el maíz y la soja se defendieron, pero el trigo y el sorgo perdieron valor.