Otra polémica: el Presidente, sin escarapela a la vista

El presidente Javier Milei encabezó el habitual Tedeum que se realiza cada 25 de Mayo en la Catedral Metropolitana, en conmemoración al Día de la Patria, con una particularidad: lo hizo sin llevar escarapela.

Desde las redes sociales, y en respuesta a las críticas que recibió el mandatario luego de concurrir sin el símbolo patrio, seguidores de Milei aseguraron que sí llevaba el distintivo, pero debajo del abrigo; sin embargo, ninguna foto tomada durante la ceremonia logró captarlo.

Por el contrario, la vicepresidenta Victoria Villarruel sí asistió con un prendedor celeste y blanco, como el resto de los funcionarios; incluso, sus seguidores lo resaltaron: “Ella sí lleva escarapela”.

Este hecho, que pareciera menor, se suma a sucesos anteriores en los que el jefe del Estado dio más relevancia a imágenes o personalidades de otros países, que tienen cierta tensión con nuestro territorio.

Primero fue al asumir la presidencia, cuando se supo que, además de reivindicar y admirar a Margaret Thatcher, tenía una foto suya en el despacho presidencial. Esa semana una revista la publicó en exclusiva: la foto de la mandataria inglesa aparece en su escritorio junto a la imagen del expresidente estadounidense Ronald Reagan.

Otra situación que fue repudiada por gran parte del arco político surgió en los dos actos que tuvo bajo su presidencia del ‘Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de las Malvinas’, por no haber sido explícito ante el reclamo de soberanía sobre las Islas. Sin ir más lejos, hace dos días, la localidad rionegrina de Bariloche, a través de su Consejo Deliberante, declaró a Milei “persona no grata” por ese motivo.

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