“¡Viva la libertad carajo!”, un grito de guerra israelí

Israel atacó ayer “objetivos del régimen y cuerpos de represión gubernamentales en el corazón de Teherán”, pero los funcionarios israelíes insistieron en que no buscan derrocar al gobierno de Irán, su archienemigo desde la Revolución Islámica de 1979 del país.

El ejército israelí advirtió a los iraníes que continuaría atacando sitios militares alrededor de Teherán durante “los próximos días” mientras su enfoque también se ha desplazado a objetivos simbólicos, como la prisión de Evin, emblema de la represión. La instalación es conocida por albergar a ciudadanos con doble nacionalidad y occidentales que Irán utiliza a menudo como moneda de cambio en negociaciones con Occidente.

Evin también tiene unidades especializadas para prisioneros políticos administradas por la Guardia Revolucionaria, que responde únicamente al líder supremo del país, el ayatolá Alí Jamenei. La instalación es objeto de sanciones tanto de Estados Unidos como de la Unión Europea.

Gideon Saar, ministro de Asuntos Exteriores israelí, al elogiar en las redes sociales el ataque aéreo de su país a la tristemente célebre prisión iraní de Evin, utilizó el lema político del presidente Javier Milei, un firme aliado de Israel en la región. “Advertimos a Irán una y otra vez: ¡dejen de atacar a civiles! Continuaron, incluso esta mañana. Nuestra respuesta: ¡Viva la libertad, carajo!”, escribió Saar.

El domingo, el presidente estadounidense Donald Trump planteó abiertamente la posibilidad de impulsar un nuevo gobierno en Irán, tras haber efectuado horas antes un ataque sin precedentes con bombarderos furtivos a tres sitios nucleares iraníes.

“Si el actual régimen iraní no puede hacer grande a Irán otra vez, ¿por qué no habría un cambio de régimen?”, preguntó en su sitio web Truth Social.

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La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, expresó más tarde que Trump estaba “simplemente planteando una pregunta”. Sin embargo, las sugerencias de derrocar al gobierno iraní provocaron nueva ira desde Teherán, que insiste en que no negociará en este momento.

Además del bombardeo a Evin, el ejército israelí también confirmó que atacó rutas alrededor de la instalación de enriquecimiento de uranio de Fordo para obstruir el acceso al sitio subterráneo, que fue uno de los golpeados en el ataque del domingo que llevó a acabo Estados Unidos.

“El dictador iraní será castigado con toda la fuerza por atacar el frente interno israelí” , dijo Israel Katz, ministro de Defensa israelí.

Según un funcionario israelí familiarizado con la estrategia del gobierno y que pidió reserva de identidad, Israel está apuntando a estos sitios para presionar a la administración iraní, pero no busca activamente derrocarla.