Una discusión vecinal en Villa Ponsati terminó en otro homicidio en la Región

Los investigadores del crimen del “chapista” de 40 años que residía junto a sus hijos en Villa Ponsati, saben que entre la víctima y el grupo de vecinos con los que mantuvo la discusión fatal, tenían problemas de vieja data.

La tragedia en la esquina de 612 y 124, alrededor de las diez de la noche del domingo, se habría desencadenado por palabras fuera de lugar contra una de las hijas de Carlos René Antúnez. Quizás, la enemistad volvía a expresarse en la forma de “una desubicación” con una menor de edad, calculó un investigador de la Policía.

Esa situación habría impulsado a Antúnez a reprochar al responsable de esa inconducta, quien estaba junto a otros hombres, todo residentes en el barrio, lo que derivó en un áspero cruce de palabras.

El episodio terminó de la peor manera para quien mostró su enojo por el momento que había afrontado la chica. También con el presunto agresor y sus tres acompañantes detenidos. Eso ocurrió ayer, luego de que fueron identificados por ocasionales testigos y durante allanamientos en sus viviendas, autorizados por autoridades judiciales en turno.

En lo que va de 2018, en la Región se suman 46 homicidios.

Por este asesinato se instruyeron actuaciones en la comisaría de Villa Ponsati por “homicidio en riña”. Los sospechosos por ese delito son cuatro hombres de 53, 29, 22 y 20 años, todos de nacionalidad paraguaya. Hasta el momento no pudo ser incautada el arma blanca con el que le quitaron la vida a Antúnez.

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Sobre este último, un vocero policial citó que era también paraguayo, aunque en el barrio aseguraron que nació en la provincia argentina de Misiones.

Uno de los vecinos del barrio, Fernando Núñez (30), le contó a este diario sobre la trágica discusión que “esto pasó después de las 10 de la noche (del domingo), cuando ya me había acostado y de repente sentí gritos que provenían de la calle”, dijo.

El hombre añadió que “en ese momento no les di mucha importancia, porque suele ser algo común por acá, a la noche. Pero a los pocos minutos escuché gritos desgarradores y de nenas. Entonces, decidí levantarme y salir a ver qué pasaba”, reveló luego.

La escena con la que se encontró afuera lo estremeció: en la esquina estaba tirado en el piso, en medio de un charco de sangre, su vecino Carlos Antúnez, rodeado de un grupo de vecinos.

Núñez citó que “ahí supe que quienes gritaban eran las tres hijas de Antúnez, que estaban con su hermano. Todos menores de edad. Los cuatro tienen entre 9 y 17 años”.

Alertados de lo que allí sucedía, enseguida arribaron móviles policiales. En uno se trasladó a la víctima al Hospital San Martín donde falleció pese a las maniobras de reanimación.

Núñez sostuvo además que “la ex mujer de Antúnez ya se llevó a sus hijos a Merlo, donde vive”.