Se complica el rescate del nene del pozo en España

Los trabajos de “encamisado” para garantizar la seguridad de los mineros que bajarán a buscar a Julen, el niño que lleva diez días en el fondo de un pozo en un monte de la localidad española de Totalán, Málaga, volvieron a complicarse ayer debido a una “saliente” de roca en el túnel, que obligó a reducir el diámetro del tubo de protección.

El nuevo revés sigue retrasando el operativo, ya que la previsión era que los rescatistas pudieran ingresar anoche al túnel vertical para comenzar a excavar de forma manual la galería, de unos cuatro metros, con la que conectarán con el pozo en el que está Julen.

Los problemas se acumulan día tras día, pero el equipo de rescate -conformado por unos 300 expertos- no se desanima y sigue buscando soluciones ante cada nuevo escollo, animado por la esperanza de poder rescatar al niño de dos años con vida.

En la víspera, cuando la brigada de mineros ya se preparaba para bajar a 72 metros de profundidad para iniciar la construcción de la galería horizontal, surgió un imprevisto debido a que los tubos para el encamisado del túnel vertical no “encajaban”. La excavadora no deja las paredes lisas, por lo que es complejo introducir los tubos de seguridad.