No daba más: Justin Bieber ¿se casó para poder tener sexo tras un juramento?

Justin Bieber parecía un muchacho tristón y bastante obsesionado con su ex, Selena Gomez, con la cual en los intersticios de sus relaciones se volvían a juntar, demostrando que la piel, siempre, siempre, tira.

Y sin embargo de un día para otro se puso en pareja, pero pareja en serio, con Hailey Baldwin, sobrina de Alec y con una carrera en ascenso como modelo e “it girl”.

Y no solo comenzó una relación como si Selena fuera historia: en cuestión de meses se comprometieron y, cuando muchos auguraban que todo era producto de la típica etapa de Luna de Miel, se casaron.

Pero parece que hay una explicación para estas conductas erráticas de Justin, que pasó de soltero desencajado a felizmente casado: como toda estrella de la música, el cantante mantenía relaciones sexuales con muchas mujeres, pero en el último tiempo, lejos de disfrutarlo, se había convertido en un problema para Bieber, quien decidió entregarse a un celibato autoimpuesto “para sentirse más cerca de Dios”, según informó Vogue, revista de la que la pareja fue tapa en su última edición.

Hay que recordar en este punto que Bieber, a pesar de sus “travesuras” que lo han llevado incluso a tener encontronazos con la ley, fue criado en el seno de una familia muy creyente, y es un joven bastante religioso.

¿Qué tiene todo esto que ver con Hailey? Bueno, parece que la decisión de Bieber se dio en el marco de cambios más profundos en su vida, que le llevaron a abandonar los aspectos más frívolos de su vida. Y en ese plan, pudo abandonar la obsesión y encontrar un amor verdadero en Baldwin.

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Pero, pequeño problema, al conocer a Hailey, el artista había decidido no tener relaciones hasta contraer matrimonio, tal como indican los mandatos religiosos. ¿La solución? Simple: acelerar las cosas y casarse.