Esta noche, en muchas casas y departamentos de La Plata, siguiendo una de las tradiciones mas populares de los Estados Unidos, se festejará la “Noche de Brujas”, el “Halloween” que con sus clásicos disfraces y el famoso juego del “truco o trato” se ha venido imponiendo en los últimos años. Pero también en nuestro país se recuerda en estos días, como todos los 1 y 2 de noviembre, “El Día de Todos los Santos”, lo que a su vez en México principalmente pero también en otros países de Latinoamérica se conoce como “El Día de los Muertos”, uno de los festejos más tradicionales y representativos. Es así que estas fechas en las que se le rinde homenaje a los antepasados, fueron traspasando fronteras para convertirse en una fiesta global que, con distintos nombres, se celebra en diversas ciudades del mundo.
Y si bien la “Noche de Brujas” se ha popularizado en casi todo el mundo gracias a la influencia estadounidense, sus raíces folclóricas y paganas vienen de otras tierras, y son muchas las culturas que tienen celebraciones equivalentes con tradiciones propias.
Si hay una fiesta equivalente a Halloween que rivalice en fama con ella, por ejemplo, esa es sin duda la de “El Día de los Muertos” en México, que con diferentes raíces y tradiciones, tiene como nexo en común el culto a los difuntos.
Allí, con la “Santa Muerte” como protagonista, se suceden coloridas celebraciones donde la vitalidad sustituye al misterio en desfiles y fiestas llenos de disfraces, música, decoración e incluso humor.
Su tradición indica que el 31 de octubre a medianoche las puertas del cielo se abren y los espíritus de los más pequeños regresan a la tierra junto a sus seres queridos durante 24 horas, a los que realizan ofrendas de juguetes y dulces, mientras que a su vez el 2 de noviembre regresan las almas de los adultos, y sus ofrendas son cigarrillos y mezcal.
Con las calaveras como protagonistas en vez de las calabazas de Halloween, los niños piden dinero en lugar de golosinas, pero no faltan los dulces, especialmente el pan de muerto y las calaveras de azúcar y chocolate caliente, además de comidas como los tamales o las tortillas, y otras bebidas y alimentos.
Estos alimentos, junto a flores y fotos, decoran los altares en las casas y las tumbas de los difuntos. Estas ofrendas en altares no solo son algo común en México, sino también en otros países como Bolivia, donde los llenan de dulces en forma de muñecos, o Perú. Y aunque las fechas y tradiciones coincidan, en otros lugares como Guatemala hay variaciones, ya que allí la costumbre es elevar barriletes gigantes al cielo.
Los celtas creían que en Samhain los espíritus regresaban a visitar el mundo de los mortales
“Es una tradición que está tan viva porque la llevamos muy cerca del corazón”, asegura Pedro Vega, encargado de cooperación internacional y asuntos culturales de la Embajada de México en Argentina, quien destaca que desde el año 2008 el festejo del Día de los Muertos fue declarado Patrimonio Cultural inmaterial por la Unesco, y que entre las tradiciones más relevantes se destaca el armado del altar con velas, fotos de las personas a homenajear, flores vistosas, y las icónicas calaveras decoradas a las que se le pone el nombre de los fallecidos, mientras que además, como parte del culto, “se prepara la comida y bebida preferida de los muertos”.
“No es que se esté adorando a la muerte - apunta Vega - sino que se rinde homenaje a nuestros muertos, a la gente querida que ya no está y a aquellos que se nos adelantaron. Es un festejo que se desarrolla con amor y alegría, lejos de un tono de tristeza, debido a que la idea de la celebración es que esa noche volverán del más allá, y es una forma de conectarnos con aquellos que se nos adelantaron”.
LA NOCHE DE HALLOWEEN
La de Halloween es una de las fiestas más populares de los Estados Unidos, y tiene sus raíces en las religiones paganas celtas e irlandesas, el “Samhain”.
Antiguamente, los pueblos celtas a menudo realizaban una gran ceremonia a fines de octubre para conmemorar el final de la cosecha. Esta fiesta fue bautizada con la palabra gaélica de “Samhain”, cuyo significado etimológico es el final del verano, y se debe a que durante esta celebración se despedían de “Lugh”, dios del Sol. Los celtas creían que en Samhain los espíritus de los muertos regresaban a visitar el mundo de los mortales.
La fiesta, que en castellano se conoce como “Noche de Brujas”, es la celebración no religiosa más grande de Estados Unidos. Sin embargo, Halloween fue introducida en el país del norte por los inmigrantes irlandeses, que celebraban el “All Hallow’s Eve” (Víspera de las reliquias), el día previo a la celebración católica del Día de Todos los Santos que tiene lugar el 1 de noviembre.
La de Halloween es una de las fiestas más populares de Estados Unidos
El año céltico concluía el 31 de octubre, en el otoño, época que para ellos significaba el fin de la muerte o iniciación de una nueva vida. Esta enseñanza se propagó a través de los años de generación en generación, y la costumbre era dejar comida y dulces afuera de sus casas en manera de ofrenda. Por otro lado, era común encender velas para ayudar a las almas de los muertos a encontrar el camino hacia la luz y descanso junto a Lugh. Fue así que el 31 de octubre por la noche, en los países de cultura anglosajona o de herencia celta, se celebra la víspera de la fiesta de Todos los Santos, con toda una escenografía para recordar a los ancestros.
Pero Halloween arribó a Estados Unidos y Canadá en el año 1840 gracias a los inmigrantes irlandeses. Sin embargo, recién en 1921, cuando se realizó el primer desfile en Minnesota, comenzó a celebrarse de manera masiva. A partir de entonces, la fiesta fue adquiriendo popularidad hasta que en 1970 se produjo su internalización gracias a las series de televisión y al cine, y mas aún a partir de 1978, cuando se estrenó “Halloween”, el film de terror de John Carpenter.
Actualmente, Halloween se celebra cada noche del 31 de octubre, principalmente en el mundo anglosajón: Estados Unidos, Canadá, Irlanda y Reino Unido, con la excepción de Australia y Nueva Zelanda, donde la tradición no está tan arraigada.
En Inglaterra, por ejemplo, Halloween es también una celebración muy popular, aunque no tan extendida como en Estados Unidos, pese a que los niños igualmente se disfrazan para jugar al “truco o trato”.
Pero además Gran Bretaña tiene otra celebración equivalente que suele festejarse el 30 de octubre en vez del 31. Ahí es cuando tiene lugar la “Devil’s Night” (Noche del Diablo) o “Mischief Night ” (Noche de las Travesuras) en la que los disfraces son costumbre y, además, los fuegos artificiales y hogueras acompañan a los desfiles celebrados.
Para comentar suscribite haciendo click aquí