El delito echó raíces en La Plata: hubo otro brutal asalto en una zona rural

La localidad de El Peligro se convirtió en las últimas horas en el epicentro de un feroz asalto que, además de las pérdidas materiales, dejó a un matrimonio en un profundo estado de shock, producto de las agresiones perpetradas por dos ladrones armados.

Según informaciones confirmadas por este diario, al menos dos delincuentes, con el rostro cubierto y pistolas, ejecutaron un violento golpes en horas de la tarde del martes en una finca ubicada en una zona rural de 209 entre 409 y 420.

Los ladrones sorprendieron a la familia mientras se disponían a compartir un almuerzo, utilizando una violencia extrema, que incluía golpes y macabras amenazas contra el propietario de la casa.

De acuerdo con el relato de la víctima a las autoridades, los intrusos ingresaron alrededor de las 12:30 del mediodía por el frente de la propiedad, luego de saltar un alambrado.

La magnitud del despliegue indica que el asalto fue una acción premeditada.

Actuaron con tal nivel de sigilo, que las víctimas recién se percataron de la amenaza cuando los intrusos se encontraban a pocos metros de la puerta.

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Si bien el dueño de casa intentó ponerse a resguardo, su suerte ya estaba echada.

En cuestión de segundos los sujetos tomaron el control de la morada, reduciendo al dueño de casa a golpes y lanzando amenazas contra su esposa.

Si bien el hombre tuvo el impulso de gritar para pedir ayuda casi de forma instantánea, le vino a la mente que el vecino más cercano se encuentra a cinco kilómetros.

Convencidos de que había dólares en la casa, los asaltantes exigieron que les indicara su ubicación.

Mientras le ataban las manos, el propietario, al que le sacaron el reloj, les explicó que contaban con ese tipo de moneda. Fue entonces cuando el líder del grupo ordenó a su cómplice que comenzara a registrar toda la casa en compañía de la mujer.

Con la intención de que los asaltantes abandonaran la finca lo antes posible, la dueña se dirigió directamente al lugar en el que tenían guardada la recaudación de su negocio de venta de huevos.

Finalmente, los asaltantes lograron hacerse con aproximadamente 150 mil pesos.

Una vez que obtuvieron el botín monetario, los delincuentes instruyeron a la familia que debían permanecer en el lugar y les advirtieron “que pensaran muy bien si los querían denunciar”.

Luego de escuchar varios bocinazos, los delincuentes abandonaron la escena y corrieron a un auto, donde los esperaba un tercer hampón.

Los investigadores están analizando diversas evidencias y sugieren que se trató de un golpe meticulosamente planificado, basado en la cantidad de delincuentes involucrados, el horario de la operación y su estilo organizado.