3 de Noviembre de 2001 | 00:00
Hoy y mañana sube al escenario del Coliseo Podestá "Cleopatra, un musical diferente" que los creadores de "Drácula" definen como un "delirio con mucho humor"
En un país donde "el humor no está muy valorizado" realizar un espectáculo que abordara este género significó todo un desafío para Pepe Cibrián Campoy que este fin de semana viene a La Plata a presentar su última creación: "Cleopatra, un musical diferente", que él mismo define como un "delirio". Claro que se trata de un "delirio pensado", un "juego del absurdo" y fundamentalmente "un intento válido de Angel -Malher- y mío de reirnos a partir de un proyecto que, al revés de lo que hacen todas las compañías, primero llevamos al interior y en enero estrenaremos en la capital", argumentó Cibrián.
"Somos muy adictos a nuestras provincias y pensamos que comenzar haciendo
una gira iba a ser más balsámico. Los tiempos son otros, hay más posibilidades
de análisis, de encontrar otros espacios y culturalmente es muy interesante
lo que ocurre en las ciudades del interior. En los lugares donde nos presentamos
a lo largo de los cuatro meses que llevamos de gira nos recibieron con
una calidez increíble y estamos muy contentos con todo lo que se generó
con este espectáculo", contó el realizador quien destacó que "éstas son
las cosas que te llenan el alma, te hacen sentir respetado y querido".
Con 25 personas en el escenario -35 en total componen la compañía- la idea de hacer un espectáculo de humor que contara la historia de esta mítica emperatriz egipcia aunque desde un lugar particular, fue en principio de Malher, responsable de la música y dirección musical. "Hace mucho que teníamos este proyecto -concretamente 16 años- pero lo fuimos dejando de lado para hacer otras cosas. Teníamos ganas de reirnos y de divertirnos y esta obra nos permitió eso".
Cibrián reconoció que la propuesta tiene una forma de humor no del todo convencional y que se trata de una "una obra dentro de otra obra", pero ante todo "entendible para el público porque no quisimos hacer algo elitista". El creador de "Drácula" y el "Jorobado de París" destacó que "Cleopatra" es un musical más tradicional donde hay textos y canciones, y constituye "un delirio total. No tiene un gran análisis, no buscamos eso, te gusta o no, y pretende entretener con un tipo de humor que a nosotros nos gusta y que no siempre es el que se hace y... bien".
Admirador de Woody Allen y Mel Brooks, del que evoca con sonrisas pasajes de humor de sus más memorables películas, a Cibrián también le gusta el tipo de comicidad que proponen series norteamericanas como "Will and Grace" y "Friends", en tanto Malher más localista no deja de mencionar a Jorge Luz, Beatriz Bonnet y a la gran Ana María Campoy, la madre de Pepe.
Por eso "Cleopatra" marca un cambio en el rumbo de esta exitosa dupla, que se permite transitar por la investigación y el ensayo, aunque "es difícil en una sociedad a la que le cuesta aceptar los cambios". En este sentido el director no se siente un revalorizador del género musical en sí mismo, pero sí de su propio trabajo. "Lamentablemente no surgieron musicales locales, lo que se estrena en Buenos Aires se importa a partir de una fórmula ya probada. Este es un país donde lo que se valora es el éxito que no siempre tiene que ver con el talento; por eso creo que nosotros logramos un espacio revalorizado desde y para nuestro trabajo".
"Cuando decidimos hacer 'Drácula' a Lecture le decían que estaba loco, que era una locura gastar tanto dinero en esa producción. Cuando el espectáculo se convirtió en el éxito de público que fue, él nos dijo que confió en nosotros porque 'estaba acostumbrado a hacer campeones'. Y esas palabras nos llenaron de orgullo. Pero 'Drácula' es algo irrepetible, por las condiciones sociales, económicas en las que estaba el país. Lo que sí me conmueve es la cantidad de gente que me dijo que esa obra le había modificado en algo la vida".
El elenco de este musical lo componen actores que ya trabajaron con Cibrián en dos o tres espectáculos anteriores. "Esta vez no hicimos casting sino que fue una selección interna. Todos cantan, bailan, actúan y participan todo el tiempo". Para Cibrián los actores tienen que tener fundamentalmente sensibilidad pero sobre todo "ser buena gente. El talento es algo que se estira; un actor si tiene algo de talento y lo trabaja puede estirarlo, aunque esto supone a veces dolor, no es algo fácil y no todos están dispuestos a hacerlo porque lamentablemente vivimos en una sociedad donde es más importante el éxito que el trayecto. Los actores tienen que prepararse y trabajar para luego actuar"
La puesta de "Cleopatra" no tiene escenografía aunque sí un gran despliegue de vestuario. "El teatro es mágico, a mi gusta crear con poco. Me parece interesante volver al desafío de crear con dos o tres cosas pero con mucho ingenio. Y 'Cleopatra' es un gran juego de Angel y de Pepe donde quisimos divertirnos mucho".
Si bien ahora están abocados a la gira de "Cleopatra" que este sábado y domingo arribará al Coliseo Podestá, Cibrián y Mahler ya están trabajando en su próximo proyecto. Un musical basado en la novela "El retrato de Dorian Gray" que según auguran tendrá "muchas sensaciones, será muy visceral, y queremos generar hasta miedo en el espectador. Si bien es una obra un poco difícil de teatralizar con Angel tenemos un montón de ideas en la cabeza que seguro se verán en julio del año que viene cuando la estrenemos".
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