Vecinos movilizados por una nena que estaba sola en la calle

Una nenita de alrededor de dos años caminaba sola, en la mitad de diagonal 80, con un montón de autos y micros que se acercaban rápido. La gente que la vio tuvo que apurarse en ir a rescatarla para salvarla. La madre apareció luego y se la quiso llevar, pero varios testigos se lo impidieron y llamaron a la Policía. Un importante revuelo se generó entonces en la zona aledaña a EL DIA, ayer a la tarde, a partir del caso, que también tuvo como protagonista a un grupo de vecinos, que se mostró indignado por la falta de cuidados para alguien tan indefenso.

El incidentes se dio cerca de las 15.30, sobre esa avenida a la altura de calle 4, en uno de los cruces más transitados del Centro. Hacia dónde iba la mujer con la niña es algo que no trascendió. Sí hubo muchos que resaltaron haberla visto “fuera de sus cabales”. Un agente que intervino en el episodio intuyó que podría haber estado “bajo los efectos de las drogas o el alcohol”.

La nenita jugaba y andaba para todos lados, como cualquiera de su edad, sin entender el riesgo que se cernía en torno a ella. De hecho, “cuando la rescataron, iba a pasar por ahí un colectivo” por lo que un hombre que vio la situación “esquivó unos autos, entre los bocinazos, y la trajo para la vereda”, contaron testigos.

La nena todavía no habla, por eso se dificultó encontrar a la madre -de 19 años y oriunda de Punta Lara, según datos extraoificiales- que para ese momento ya había cruzado al otro lado de la diagonal. Cuando la ubicaron, “la alzó como pudo, se fue caminando en zig zag y parecía que la criatura se le iba a caer”, señalaron las mismas personas que vieron la secuencia.

tension

La gente que la siguió por una cuadra le reclamó una y otra vez que la soltara. Varios llamaron al 911 y continuaron sin perderle el rastro, preocupados por la niña. En la esquina de diagonal 80 y 3, una pareja de policías de la Local la interceptó.

Las 15 personas que le habían seguido el paso se quedaron mirando cómo continuaba todo. Algunos filmaban o sacaban fotos, y la miraban con bronca. Hasta tuvieron que soportar los insultos y reproches de la joven madre, que les recriminaba por su actitud.

La adolescente pretendía seguir su camino con la nena, pero los efectivos, principalmente la mujer, se lo impidieron y le ordenaron dejarla en el suelo.

Poco a poco, se fueron sumando más agentes. “¿Otra vez vos?”, se escuchó que le reclamaba una de las uniformadas, que aparentemente ya se la había cruzado en algún otro operativo.

El procedimiento en 3 y 46 se extendió por más de una hora. Recién a las 17 los móviles policiales se retiraron del lugar, con destinos diferentes.

Parte de la demora del operativo estuvo vinculada con el protocolo de acción que está pautado para estos casos. La dirección municipal de Niñez y Adolescencia intervino con operadores de calle especializados en estas cuestiones.

Ellos fueron a buscar al abuelo de la criatura -el padre de la mamá- hasta Ensenada para entregársela, informaron desde esa dependencia comunal. La nena entonces quedó a resguardo del hombre.

La adolescente, por su parte, fue conducida en un patrullero a la comisaría Primera. Por lo que se informó de fuentes oficiales, quedó demorada bajo el cargo de maltrato infantil.

Lo que no trascendió fueron las condiciones de salud e higiene en las que se encontraba la niña. Más allá de esa cuestión, el reclamo generalizado de los testigos de la secuencia fue por el desdén y la falta de cuidados para con esa chiquita indefensa.