La venta callejera se expande y una feria copa más rincones del Pasaje y de la plaza San Martín

Ahora, la venta ambulante copó el veredón del primer piso a cielo abierto del Pasaje Dardo Rocha, sobre la calle 50 hacia la avenida 7. Unos 40 puestos se desplegaron ayer a lo largo de ese espacio, en unos 50 metros de extensión.

Bajo la modalidad de “feria americana” familias, jóvenes embarazadas con sus pequeños hijos y mujeres mayores ofrecían, sobre mantas tiradas al suelo, ropa usada de todo tipo, para grandes y chicos. También se comercializan alimentos elaborados.

En tanto, en la plaza San Martín crece la cantidad de manteros que también, en líneas generales, venden ropa y accesorios de vestir de segunda mano. Prácticamente todo el espacio verde céntrico está ocupado por gente que ofrece mercadería textil, pero también juguetes y golosinas.

En los dos casos se ofrece, a bajo precio, pantalones de vestir, jeans, remeras, chombas, camisas, pullovers, enteritos de bebé, ropa de niños, pañuelos de cuello, calzado de todo tipo.

Durante la movida, que en este caso tuvo lugar ayer en esa suerte de galería del Pasaje, además de la gente que había montado puestos de venta algunas mujeres ponían a la venta empanadas, porciones de tartas y de tortas, pizza, facturas, pastelitos y otros alimentos de elaboración casera.

Bien al estilo “feria americana” (venta de artículos usados), el acceso al centro cultural comunal se convirtió en un incesante desfile de mujeres cargadas con bolsos repletos de prendas y así, la mercadería se renovaba hora tras hora. Entre la expansión de puestos y la gente que se acercaba a observar, y a comprar por momentos no quedó libre ni un metro del espacio.

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El mismo tipo de venta ocupó anteayer la plazoleta situada frente a la basílica San Ponciano. El espacio que rodea la tradicional fuente, sobre las lajas características, fue escenario, durante las horas de la mañana, de la comercialización de ropa y accesorios usados.

No es la primera vez que se utiliza el veredón histórico del Pasaje para la venta de productos de segunda mano. Esa feria platense había surgido hace cuatro años. En aquella oportunidad no era más que una veintena de puestos hasta que un operativo municipal los desalojó. Un poco como desprendimiento de aquel grupo de puesteros se formó en que está ahora en auge en la plaza San Martín. Ya con una ocupación “plena” en el emblemático espacio verde de la Ciudad, la actividad volvió a 50 entre 6 y 7.

EN EXPANSIÓN

El último relevamiento sobre la presencia de la venta ambulante en la Ciudad, difundido a mediados de agosto por la Cámara Argentina de Comercio, mostró que la cantidad de puestos creció 8% en relación con el relevamiento anterior. Mientras, en la Comuna apuestan a mudar a los manteros a un predio de 80 y 134, con lugar para 800 vendedores.