El Pincha, con sus necesidades y emergencias, visita al Matador

La inesperada eliminación frente a Belgrano de Córdoba por la Copa Argentina dejó a Estudiantes y en particular a Ricardo Zielinski en una posición por lo menos incómoda, con la necesidad de lograr una victoria en su visita a Tigre, otro equipo que llega a la octava fecha de la Liga Profesional de capa caída, algo que sorprende teniendo en cuenta que fue finalista de la pasada Copa de la Liga.

El partido, que se pondrá en marcha a las 18, tendrá como escenario el José Dellagiovanna, en Victoria, con televisación de ESPN Premium y Silvio Trucco como juez central en el marco de un grupo que tendrá también a Diego Abal y Lucas Novelli desde el predio de la AFA, a cargo del VAR.

Desde que se hizo cargo del León Zielinski no paró de cumplir objetivos, hasta que el miércoles pasado sufrió una caída que le generó algunas críticas, porque nadie imaginó quedar eliminado de la Copa Argentina en 16avos de final y manos de un Belgrano.

Claro, porque mientras el Pincha se presentó con su equipo base, el titular, el Pirata lo hizo con una formación alternativa, por cuanto su técnico Guillermo Farré priorizó el torneo de la Primera Nacional, que de ganarlo le significará el ascenso. En ese marco no se registró ninguna diferencia, y para colmo de males un penal selló el 1-0 que volvió a moverle el piso a Estudiantes en una competencia en la que le cuesta avanzar, incluso frente a rivales de categorías inferiores.

Estudiantes suma 8 puntos en el torneo, mientras que Tigre, de flojo arranque también, apenas 6

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El golpe fue durísimo, y el posterior análisis de Zielinski, quien reconoció que el “cansancio” pudo haber sido motivo de la derrota, lo puso entre la espada y la pared, porque para refrescar a su formación debería modificar su idea de poner todas las fichas en cada uno de los partidos.

Esta caída, además, se registró en el marco de un bajón que se hizo más notorio desde la derrota contra Independiente. Hasta esa cuarta fecha, los albirrojos, sin exhibir un buen nivel, venían de empatar con Gimnasia (1-1), y de vencer a Aldosivi (1-0) y a Sarmiento (2-1), pero tras el 1-2 frente al Rojo, volvieron a perder contra Newell’s (0-2), Arsenal (1-2) y luego lamentaron un empate 2-2 de local ante Central Córdoba, tras una ventaja de dos goles.

Los resultados terminaron certificando la evidente declinación posterior a la Copa de la Liga, torneo que cerró el primer semestre y en el cual Estudiantes, tras una muy buena etapa clasificatoria, se quedó en cuartos de final en la eliminación con Argentinos por penales.

Por el contrario, y también llama la atención, la campaña del Pincha en la presente edición de la Libertadores es impecable. Empezó en etapa de Repechaje, y tras clasificar pasando dos series eliminatorias, se adjudicó el Grupo C en forma contundente y en Octavos pasó con goleada a Fortaleza.

En este contexto, y mientras espera lo que será su cruce con Athletico Paranaense, por Cuartos del certamen continental, el elenco albirrojo deberá trasladarse hasta la cancha de Tigre para enfrentar a un rival que también necesita encaminarse en una competencia en la que después de ganarle de visitante a Unión, por la primera fecha, no pudo repetir el festejo.

El Matador empató con Barracas Central, perdió con Banfield y con Boca, igualó sucesivamente contra San Lorenzo y Talleres, y en la última fecha cayó frente a Argentinos.

Diego Martínez, su técnico, no ha podido sostener la estatura futbolística alcanzada por los suyos en el torneo anterior, y en la búsqueda de soluciones comenzó a realizar variantes sin los efectos esperados. Sacó a Marinelli del arco, misma situación con Prediger y Magnín, en su momento intocables, y para este partido contra Estudiantes tuvo que buscarle un reemplazante a Luciatti, suspendido.