El clásico cordobés no pasó de la fiesta en las tribunas: 0-0

La ronda de partidos de la cuarta fecha de la Copa de la Liga se completó anoche en Córdoba, ciudad en la que se cruzaron Talleres e Instituto, sin goles y con un detalle no menor: público de los dos clubes en las tribunas del estadio mario Alberto Kempes.

Con este marco, y la consecuente presión, al juego le faltaron espacios, y si bien la “T” hizo lo posible para marcar un predominio, no terminó de imponer condiciones frente a un rival que se apretó en terreno propio y le contestó de contra.

Una supuesta falta a Ramón Sosa, que el árbitro interpretó como penal, quedó en la nada cuando Yael Falcón Pérez repasó la imagen en el monitor del VAR y sostuvo la paridad.

Un par de variantes cambiaron el panorama a favor de “La Gloria” en la etapa complementaria, y la búsqueda de Adrián Martínez, como referente de áarea, fue una complicación para los marcadores que esperaban y pasaron un par de sustos.

Con el final a la vista, ambos equipos entendieron que el empate no estaba mal y priorizaron la defensa dentro del clima de fiesta que aseguraron los casi 60.000 hinchas que ocuparon las tribunas como en aquellos viejos tiempos.

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