Los famosos, en Miami: del aliento por Argentina en la final de la Copa América a los reclamos por los incidentes

La previa de la final de la Copa América, que enfrentaba a la Selección Argentina con Colombia, no solo generó expectativas en cuanto al juego, sino que también marcó un evento significativo en las tribunas y en las redes sociales. El Hard Rock Stadium de Miami se convirtió en un escenario donde las celebridades de ambos países competían en popularidad y apoyo a sus respectivos equipos nacionales. Este fenómeno se convirtió en una suerte de espectáculo paralelo al deportivo, atrayendo miradas y comentarios desde diversos rincones del mundo.

Entre las celebridades argentinas, la presencia de la cantante Soledad Pastorutti llamó particularmente la atención. La Sole, con su carisma inigualable, se dejó ver minutos antes del partido en el césped del estadio, un gesto que fue interpretado como un intento de acercarse al calor del público y transmitir ese ánimo a los jugadores. Pastorutti, conocida por su humildad y conexión con sus seguidores, no estaba sola. Se la vio en compañía del presidente de la Conmebol, el paraguayo Alejandro Domínguez. Domínguez, sonriente en ese momento, no pudo prever las críticas que le lloverían después debido a la desorganización y los desmanes que retrasaron el inicio de la final.

La hinchada vip argentina no se limitó a Pastorutti. Un variopinto abanico de celebridades se desplegó en las gradas para alentar a la selección de Lionel Scaloni. Entre ellos destacaban figuras como Jimena Barón, actriz y cantante, que compartía su experiencia en el estadio con su hijo y sus amigos, la conductora Sofía Jujuy Jiménez y el actor Agustín Cachete Sierra. La imagen de Barón y su séquito en un auto promocionado por una conocida marca de desodorantes se viralizó rápidamente, convirtiéndose en una postal de la previa del partido.

El conductor televisivo Marley y Carlos Maslatón, influencer financiero y panelista de C5N, también formaron parte de esta hinchada de lujo. Marley, con su conocido sentido del humor, aportaba un toque de alegría y camaradería, mientras que Maslatón, siempre controvertido y con opiniones fuertes, generaba debate tanto en el estadio como en las redes sociales. Además, no podía faltar la presencia de glorias del pasado futbolístico argentino como Ubaldo Matildo "El Pato" Fillol, ex arquero de la selección, quien revivía sus días de gloria y compartía su experiencia con los presentes.

Mientras tanto, la selección de Colombia no se quedaba atrás en cuanto a celebridades se refiere. El cantante Sebastián Yatra, al igual que Soledad Pastorutti, también pisó el campo de juego, enfundado en la camiseta de su país. Yatra, con su simpatía y encanto juvenil, generó un ambiente de camaradería y apoyo incondicional. Sin embargo, fue Maluma quien realmente acaparó la atención en la previa, mostrándose haciendo jueguito con una pelota en su cabeza, un gesto que demostró su habilidad y pasión por el fútbol.

Las redes sociales fueron un reflejo de lo que sucedía en el estadio. Karol G, encargada de entonar el himno colombiano antes del partido, posaba junto al también cantante Feid, generando una ola de comentarios y likes. La imagen de Karol G y Feid se convirtió en un símbolo del apoyo de las celebridades colombianas a su selección, mostrando que el fervor y la pasión no conocían fronteras.

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Los reclamos de los famosos por los incidentes en la final de la Copa América

Jimena Barón, una reconocida actriz y cantante, había viajado con su hijo Morrison para vivir de cerca este momento histórico. Acompañada por la modelo Jujuy Jiménez y el actor Agustín Cachete Sierra, Jimena se mostró en una combi camino al estadio, intentando mantener la calma en medio del desorden. Sin embargo, sus redes sociales quedaron en silencio una vez que llegaron al lugar, sin fotos ni actualizaciones desde el interior del estadio, lo que dejó a sus seguidores con la incógnita sobre su paradero y estado de ánimo.

Por otro lado, Lola Latorre, hija de los conocidos Yanina y Diego Latorre, expresaba su entusiasmo por asistir a la final. Sin embargo, su alegría se transformó rápidamente en descontento al enfrentar las complicaciones en el ingreso. "Estados Unidos, el peor lugar donde se puede hacer la Copa América", fue su contundente crítica, reflejando la desilusión de muchos que compartían su opinión. No obstante, su tenacidad dio frutos y, casi una hora después, compartió una foto desde dentro del estadio, señal de que había logrado superar las barreras y finalmente estaba lista para disfrutar del partido.

En un tono similar, Marcelo Tinelli, una figura central de la televisión argentina, documentaba su odisea para llegar al Hard Rock Stadium. Acompañado por familiares y amigos, Tinelli describía con detalle las dificultades que encontraron para ingresar al recinto. "Ya estamos acá, no saben lo que fue la entrada, mucho lío para entrar, pero ya estamos acá en el VIP, gracias a Dios esperando el partido", relataba, haciendo eco de la experiencia de muchos hinchas que, como él, habían soportado largas filas y confusión antes de poder tomar sus asientos. Con su habitual carisma, añadió un toque de humor a la situación: "Picante la entrada, picante. Vamos a ver cómo va el partido hoy. Argentina - Colombia. A muerte con la celeste y blanca".

Lejos de las controversias y los problemas de acceso, Luciana Salazar, otra celebridad argentina, mantenía una actitud positiva. Desde el estadio, compartía su entusiasmo y expectativa, simplemente esperando a que comenzara el espectáculo. "Esperando a que empiece, vamos Argentina", escribía, encapsulando el sentimiento de esperanza y emoción que aún prevalecía entre los aficionados.

Nicolás Occhiato y Diego Leuco, dos jóvenes talentos del periodismo y la televisión, también hacían eco de la atmósfera en sus redes sociales. Desde el campo de juego, no sólo documentaban su propia travesía sino que además tenían el privilegio de entrevistar a Abel Pintos, el famoso cantante encargado de entonar el Himno Nacional Argentino antes del partido. Esta interacción añadía un toque cultural y emotivo al evento, destacando la conexión entre el deporte y la música como elementos unificadores de la identidad argentina.

Por último, Stefi Roitman, en compañía de su esposo Ricky Montaner y su cuñada Evaluna, se mostraba camino al estadio, todos vestidos con la emblemática camiseta celeste y blanca. Su presencia representaba una mezcla de culturas y nacionalidades unidas por una misma pasión, subrayando la globalización del fútbol y su capacidad para unir a las personas más allá de las fronteras.