Ahora piden desplazar a Melazo y al fiscal por presunto encubrimiento

El juez de garantías platense César Melazo y el fiscal de Brandsen Mariano Sibuet siguen en el epicentro de una tormenta que recrudece con el correr de las horas. Un día después de que la justicia federal de San Isidro allanó sus oficinas y las de la Procuración General de la Corte provincial, dos senadores bonaerenses pidieron que se los aparte preventivamente de sus cargos, por el supuesto encubrimiento al ex barrabrava y puntero kirchnerista Marcelo Mallo.

Este hombre que supo liderar Hinchadas Unidas Argentinas lleva ocho días prófugo, después de que un peritaje (que demoró 5 meses, sin que todavía quede claro por qué) confirmó que un arma que le secuestraron en su casa de Quilmes estuvo implicada en el doble crimen de dos narcotraficantes acribillados en 2008 en el estacionamiento del Unicenter de Martínez.

El 24 de junio Melazo ordenó la captura de Mallo, pero ya se había “filtrado” la información a la prensa y cuando la policía lo fue a buscar, el ex puntero ya no estaba.

“Posteriormente a que se hiciera público el resultado de las pericias (del arma) y luego de que Marcelo Mallo diera varias notas a distintos medios periodísticos, sin tomar el más mínimo resguardo, el juez Melazo retardó de manera injustificada el dictado de una orden de detención, posibilitando que éste se diera a la fuga de manera grosera, ante la atónita mirada del conjunto de la sociedad”, explicaron los senadores Juan Pablo Allan (Cambiemos) y Jorge D’Onofrio (presidente del bloque del Frente Renovador) al fundamentar el pedido que formularon en las últimas horas.

Los legisladores solicitaron a la Secretaría Permanente de Enjuiciamiento de Magistrados y Funcionarios de la provincia de Buenos Aires el “apartamiento preventivo” de Melazo, en una denuncia que alcanza también al fiscal de la UFI descentralizada de Brandsen, Mariano Sibuet.

ANTECEDENTE 

Según explicaron, a esta medida la contempla el artículo 29 bis incorporado a la Ley de Enjuiciamiento de Magistrados y ya se aplicó con otros dos funcionarios judiciales bonaerenses: el fiscal general de San Isidro Julio Novo, a quien la Suprema Corte suspendió en noviembre pasado -junto a sus fiscales adjuntos- por el presunto vínculo con una red de narcotráfico internacional; y la jueza de familia de Pilar Alejandra Velázquez, acusada de vender adopciones.

Allan y D´Onofrio pretenden que sea la Suprema Corte la que suspenda en sus cargos a Melazo y a Sibuet, para sortear así las inevitables dilaciones que implica la designación de un jurado de enjuiciamiento. Es que ya había uno integrado para otro jury que se le abrió a Melazo en 2015 (ver aparte), pero el juez lo recusó argumentando que no pudo presenciar el sorteo porque no le notificaron la fecha.

Fuentes oficiales confirmaron a este diario que el sorteo del nuevo jurado se hará el próximo miércoles, a las 10.30 de la mañana.

Si el máximo tribunal bonaerense accede al pedido, Melazo y Sibuet serían suspendidos de sus cargos por 90 días, prorrogables por otros 90, “en virtud de la naturaleza y gravedad de los hechos”. Mientras tanto, podría avanzar el jury.

La presentación de los senadores también estipula la “acumulación por conexidad”, que no es otra que incorporar las evidencias que complicarían a Melazo en la causa Mallo, al proceso abierto en su contra por la causa del 2002 (ver aparte).

“La inacción de Melazo en este tema es mayúscula, evidente y muy grave”, consideró Allan, mientras que D’Onofrio resaltó que “no es una sino decenas las denuncias en su contra que nunca prosperaron porque quedaron sepultadas en marañas de recursos y excusaciones que le dieron la impunidad que gozó hasta ahora”.

“Deben sacarlo ya mismo del juzgado, porque está por entrar en el turno y ya sabemos a qué se dedica en esos periodos con las causas de los juzgados en feria”, remató.

Sibuet es el único fiscal en Brandsen. Si lo suspenden, será la Procuración o la Fiscalía General la que resuelva su reemplazo.

CRONOLOGIA

El puntapié para el escándalo lo dio el ataque a tiros de dos policías boanerenses en Ranchos, el 31 de diciembre pasado, cuatro días después de la fuga de los hermanos Martín (42) y Cristian Lanatta (44) y Víctor Schillaci (35) –condenados por el triple crimen de Sebastián Forza (34), Damián Ferrón (37) y Leopoldo Bina (35)–del penal de General Alvear. La causa recayó en Brandsen. Sibuet pidió allanar la casa de Mallo y su hija, entre otras. Y en la del primero secuestraron, el 3 de enero, una pistola Tanfoglio calibre 40.

La Policía Científica de la Bonaerense peritó el arma entre el 4 y el 14 de enero. El 24 de ese mes constataron, por comparación de fotos a proyectiles, que era la misma que usaron para el asesinato de los narcos colombianos Jorge Alexander Gartner (35) y Héctor Edilson “Monoteto” Duque Caballos.

El jefe de Científica, el comisario mayor Marcelino Cottier, habría enviado esa información por correo a Sibuet y en el expediente habría ingresado el 4 de febrero, pero el fiscal pidió una constatación a la Policía Federal recién en mayo. Sibuet asegura que el resultado se lo informaron el día que se ordenó la detención de Mallo, es decir, el 24 de junio.

La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, apuntó contra el fiscal por esa demora. Y Elisa Carrió adjudicó a los magistrados bonaerenses la “protección” a Mallo, que atribuyó a una presunta vinculación de Melazo con el ex jefe de Gabinete Aníbal Fernández.