A tres años de su muerte, homenaje íntimo a Alberto Nisman

El ex fiscal Alberto Nisman era homenajeado esta mañana, al cumplirse tres años de que fuera hallado muerto de un disparo en la cabeza, en el marco de una ceremonia que se desarrollaba en el cementerio israelita de La Tablada, con la presencia de sus dos hijas, Iara y Kala, de su madre, Sara Garfunkel, de su hermana, Sandra Nisman, entre otros.

Organizada por la AMIA, la ceremonia comenzó cerca de las 10hs. con un minuto de silencio y la colocación de una ofrenda floral en el lugar donde descansan los restos del fallecido fiscal, quien fue encontrado muerto a poco de haber denunciado por el presunto encubrimiento de los iraníes acusados del atentado a la AMIA, a la entonces presidenta Cristina Kirchner y otros funcionarios y dirigentes, hoy procesados.

Además de familiares de Nisman se encontraban presentes en el acto el titular de la AMIA, Agustín Zbar, el titular de la DAIA, Ariel Cohen Sabban, el rabino y ministro de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Sergio Bergman, y el fiscal Ricardo Sáenz, entre otros.

En tanto, de acuerdo con lo previsto, el rabino Marcelo Polakoff, cercano a la familia Nisman, sería el encargado de recitar plegarias alusivas.

También estaban presentes en la ceremonia el ex fiscal Pablo Lanusse y Luis Czyzewski, padre de Paola, una de las víctimas del ataque terrorista ocurrido el 18 de julio de 1994, con un saldo de 85 muertos y 300 heridos.

"El asesinato de Nisman está vinculado a la impunidad de la que gozan los que planificaron y perpetraron el atentado a la AMIA", sostuvo Zbar, poco antes del inicio de la ceremonia en el cementerio ubicado en la localidad bonaerense de La Tablada.

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En tanto, el rabino Polakoff consideró que "la Justicia va dando razonabilidad a lo que planteó Nisman y es exactamente por eso el motivo por el que fue asesinado".

Nisman fue hallado sin vida en su departamento de la torre Le Parc, de Puerto Madero, el 18 de enero de 2015, y un peritaje realizado por expertos de Gendarmería Nacional estableció que fue asesinado, lo que derivó en el procesamiento del técnico informático Diego Lagomarsino, como así también a los custodios Rubén Benítez, Néstor Durán, Luis Miño y Armando Niz.

Diego Lagomarsino, como presunto partícipe necesario del "plan homicida" que el juez federal Julián Ercolini entendió que se dio en torno a la muerte de Nisman, y los custodios, como presuntos encubridores y por incumplimiento de los deberes de funcionario público.