
Provincia: con el desempate de Magario, el Senado aprobó las reelecciones indefinidas
Provincia: con el desempate de Magario, el Senado aprobó las reelecciones indefinidas
Ya la trasladaron a Ezeiza: la contadora se quedó sin domiciliaria
Una docente de una escuela de Gorina denunció a madres por agresiones
La jueza Makintach renunció para evitar el jury y la quieren ver presa
$2.000.000: el Súper Cartonazo quedó vacante y aumenta el pozo
Rechazan un planteo de Cristina y el Estado le reclama $22.500 millones
Con chicanas cruzadas por Cristina, el Concejo local retoma las sesiones
Globant, el unicornio con raíces platenses, despide a mil empleados
La venta de inmuebles subió 25% en un año, pero bajó en el mes
Actividades: café literario, fiesta del sol, folclore, taekwondo, odontología gratis
Una sentencia puso de relieve la crisis de las entidades platenses de bien público
Los desafíos de viajar a través de una app en tiempos de violencia
Una sentencia puso de relieve la crisis de las entidades platenses de bien público
Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí
NATALIA KIDD
En la políglota cumbre de líderes del G20 en Buenos Aires queda demostrado que, a falta de entendimiento -de ideas y de idiomas- o por fallas de traducción, buenos son los gestos y cualquier tipo de comunicación no verbal para dejar en claro que molesta o entusiasma a los hombres más poderosos del mundo.
En medio de tanta retórica diplomática, vacua y tediosa para muchos, un apretón de manos, una sonrisa o pasar de alguien sin saludarle puede resultar mucho más elocuente en citas de altísimo nivel como la que concluirá en la capital argentina este sábado.
Uno de los gestos más comentados de hoy ha sido el choque de palmas derechas -un saludo bastante occidental- entre el presidente ruso, Vladimir Putin, y el príncipe heredero saudí, Mohammed bin Salman.
Ambos se sentaron codo a codo a la mesa del plenario de líderes, intercambiaron miradas risueñas, ajenas a las pesadas cuestiones de política internacional que afrontan pero que algún analista experto, echando mano de la intuición, podría ligar a un entendimiento entre Putin y Bin Salman sobre qué hacer con los niveles de producción de petróleo.
En la foto de familia también abundaron las muestras de lenguaje no verbal: aquello que se dice sin palabras, como con quien estrechar manos o no.
Al llegar al posado, Donald Trump pasó junto a Bin Salman y Putin sin detenerse a saludar, una actitud que no pasa desapercibida en un escenario internacional tan complejo como el actual, donde los hombres más poderosos del mundo parecen no tener pelos en la lengua, aunque no hablen entre sí.
LE PUEDE INTERESAR
Apostillas
LE PUEDE INTERESAR
El tratado entre la Unión Europea y el Mercosur quedó cada vez más lejos
Sea por descuido o por dar un sutil mensaje, Washington también dio la nota a la hora de la firma, en el marco de la cita del G20, del importante nuevo acuerdo comercial entre Estados Unidos, México y Canadá.
Los atriles ocupados por Trump, el mexicano Enrique Peña Nieto y el canadiense Justin Trudeau estaban todos coronados por el emblema oficial de la oficina del presidente estadounidense, un fallo de protocolo quizás derivado del hecho de que fue la Casa Blanca la que organizó el acto.
Con una pluralidad de lenguas enorme, los problemas de traducción también se fueron parte de este G20.
Los fallos de interpretación irritaron a Trump, cuando, en una declaración conjunta junto a Mauricio Macri en la Casa Rosada, el mandatario estadounidense se quitó el auricular y lo arrojó al suelo antes de quejarse de no comprender la traducción, mientras el jefe de Estado argentino le elogiaba.
“Entendí mejor en su idioma que a través de la interpretación”, se lamentó Trump.
Los miles de periodistas acreditados para cubrir esta cumbre también se vieron afectados por algunos fallos de traducción durante las comparecencias de altos cargos, pero más sufrieron los cortes sucesivos en las redes de internet, un fallo que, a diferencia de los mandatarios, no se solventa ni con gestos ni señales de humo.
Buenos Aires, a todo esto, sitiada por la cumbre y un operativo de seguridad sin precedentes, también se quejo a su modo “no verbal”: se estremeció, a la misma hora en que iniciaba resta cita de “pesos pesado”, con un sismo de 3,8 grados, una sacudida de la que casi no hay precedentes en la historia de la capital argentina y que justo, vaya coincidencia, se da con el G20.
ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES
HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS
Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales
¿Ya tiene suscripción? Ingresar
Full Promocional mensual
$650/mes
*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $6100
Acceso ilimitado a www.eldia.com
Acceso a la versión PDF
Beneficios Club El Día
Básico Promocional mensual
$500/mes
*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $3950
Acceso ilimitado a www.eldia.com
Diario El Día de La Plata, fundado el 2 de Marzo de 1884.
© 2025 El Día SA - Todos los derechos reservados.
Registro DNDA Nº RL-2024-69526764-APN-DNDA#MJ Propietario El Día SAICYF. Edición Nro. 6986 Director: Raúl Kraiselburd. Diag. 80 Nro. 815 - La Plata - Pcia. de Bs. As.
Bienvenido
Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí
Ante cualquier inconveniente durante el inicio de sesión, por favor escribanos a sistemas@eldia.com
Bienvenido
Estimado lector, con sólo registrarse tendrá acceso a 80 artículos por mes en forma gratuita. Para más información haga clic aquí
DATOS PERSONALES
Ante cualquier inconveniente durante el inicio de sesión, por favor escribanos a sistemas@eldia.com
¿Querés recibir notificaciones de alertas?
Para comentar suscribite haciendo click aquí