En Berisso, vecinos justicieros frustraron dos asaltos luego de reducir a los delincuentes

Sin policía a la vista, la inseguridad y el estado de indefensión que se siente en cada rincón de la Región obraron como disparadores de las reacciones de “justicia por mano propia” en dos barrios de Berisso.

Ante la amenaza que representaban dos robos en proceso la actuación de testigos logró frenar los delitos, en un caso, con un resultado por el que ahora se investiga otro, el de lesiones graves en el que resultó víctima quien se había presentado a robar un comercio y fue gravemente herido en la cabeza.

LO ATACARON CON UNA VARILLA

Ese hecho se produjo en un maxikiosco situado en avenida Montevideo entre 21 y 22.

A unos minutos de la una de la mañana, un sujeto de 38 años entró al local. Adentro, lo esperaba un empleado y en la vereda quedaba un allegado, fumando.

Si bien los propietarios del negocio no quisieron referirse a lo sucedido, al ser consultados por este diario, algunos vecinos de la cuadra contaron en detalle cómo se desarrolló todo. “Apenas el ladrón ingresó al comercio, agarró del cuello al chico que estaba para la atención al público y para asustarlo le apoyó algo con punta que el muchacho no alcanzó a ver qué era”, dijo un frentista.

El hombre, quien pidió reservar su identidad, añadió que “al parecer, este empleado gritó y su amigo que estaba en la puerta lo escuchó y lo vio en esa situación. Entonces, tomó una varilla metálica y golpeó al asaltante en la espalda”.

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Esos mismos frentistas revelaron que “el ladrón terminó con una herida en la cabeza, que no sabemos si la sufrió porque con la punta de la varilla le provocó el corte o si fue al caer y pegar su cabeza con el piso”.

Sobre cómo siguió el orden de los acontecimientos, indicaron que “nos contaron que quedó muy dolorido, tendido en el suelo. Y al rato llegó la Policía, que lo revisó y le encontró un alicate, que sería con lo que amenazó al empleado. En ese instante intentó pararse, pero no pudo porque a lo mejor estaba un poco mareado”.

Los efectivos -pertenecientes al Comando de Patrulla de Berisso, a cargo de José Luis Coria- solicitaron una ambulancia, que “tardó como media hora en llegar. Y se lo llevó al hospital Larrain, para que le hagan las curaciones correspondientes”.

“ESCAPABA DE UNA PAREJA”

Asimismo, informaron que “antes de meterse en el maxikiosco con la intención de robar, este mismo delincuente quiso robar un auto en la esquina de Montevideo y 28. Se subió a ese coche pese a que estaba una chica en su interior”.

“Pero al final no consiguió robar el auto, porque justo llegó el novio de la joven y este ladrón se bajó rápido. Y para escapar de la pareja, se subió a un taxi”, detallaron los mismos vecinos.

Enseguida relataron que “mientras la pareja lo persiguió en su vehículo al tipo, éste se bajó a las pocas cuadras del taxi, tras una discusión que mantuvo con el chofer por una cuestión que desconocemos”.

Y acotaron: “ahí fue que enseguida el ladrón entró al maxikiosco con la idea de cometer un robo. Y la pareja llegó al maxikiosco una vez que vino la Policía, contándole que también había querido previamente robar un auto”.

El asaltante fue trasladado luego al Hospital San Martín, donde fue operado a raíz de la fractura en la cabeza y ayer permanecía en terapia intensiva, informó la Policía. Así, las cosas, además de la causa por tentativa de robo, la fuente adelantó que se inició una actuación por “lesiones graves”.

IN FRAGANTI

En horas de la tarde, otro delincuente tampoco consiguió robar en otro extremo de Berisso lindante con La Plata.

Además, fue agredido por un grupo de vecinos, quienes le impidieron escapar y lo entregaron a la Policía.

Una fuente policial informó al respecto que este episodio tuvo lugar a la altura de un puente sobre un curso de agua, a pocos metros de la esquina de 125 y 87. El presunto ladrón quiso robar un auto estacionado y sin el dueño en las cercanías.

La maniobra fue oportunamente vista por uno de los vecinos del barrio, quien salió de inmediato a la calle para evitar el ilícito.

Los gritos fueron escuchados por otros frentistas, que colaboraron en atrapar al delincuente.

En ese barrio se admitió ante este diario que “a este delincuente lo golpearon un poco, lo dejaron tirado en el piso y esperaron a que venga la Policía para que se lo lleve preso”. Los oficiales le incautaron un cuchillo y lo trasladaron al destacamento de Villa Progreso.