“Venom: El último baile”: la relación más tóxica del mundo superheroico llega a su final

Hubo un tiempo en que todos querían hacer películas de superhéroes y nadie parecía prever este momento de cierta saturación: en ese momento, Sony se acordó que tenía los derechos de Venom, uno de los personajes más apreciados del universo de Spider-Man, y contrató a Tom Hardy para meterse en la piel del simbionte extraterrestre (bueno, en realidad, para que el simbionte se le meta en la piel a él).

Han pasado 6 años desde entonces: la primera película de Venom fue bien recibida por recuperar cierto tono kitsch que la solemnidad superheroica había dejado de lado, pero ya la segunda, de hace 3 años, pasó bastante desapercibida. Y hoy llega a las salas el tercer acto, el definitivo, para Eddie Brock, el personaje de Hardy, y Venom: después de un comienzo algo complicado y una separación, parecen haber encontrado una especie de equilibrio en “Venom: El último baile”.

El filme del Universo Spider-Man de Sony (que comparte al arácnido con Marvel pero que desarrolla sus otros personajes al margen) muestra la evolución de este simbionte extraterrestre y su humano huésped. Aunque las cosas entre ellos pueden estar mucho mejor, el mundo los pone a prueba y los obliga a fugarse.

“La exploración de eso a lo largo de tres películas ha sido un placer: en la primera se conocen y comienzan a estar juntos, en la segunda están hartos, se separan, pero se vuelven a juntar porque no pueden vivir sin el otro. En la tercera acuerdan ser uno y tienen que enfrentar el infierno juntos”, dijo Hardy en entrevista.

Hardy aparece en los créditos de guion junto con la directora Kelly Marcel, quien es su amiga desde hace muchos años, cuando ambos comenzaban su carrera en el cine. “Hay mucha diferencia, fue sólo el planteamiento de la historia”, aclaró el actor británico sobre su colaboración en la escritura. “Sólo las grandes ideas, todo lo que sea genial, es mi humilde contribución”, agregó con humor.

Marcel fue quien se llevó la mayor parte del guion y tiene bastante experiencia en ese campo: había escrito las primeras dos “Venom”, y también “Cincuenta sombras de Grey”. Pero con “El último baile” debuta como directora. “Se sentía como el momento correcto para dar un paso más y terminar nuestra trilogía de la forma en la que queríamos”, dijo Marcel.

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Hardy se dijo complacido por el cierre de la trilogía de “Venom” iniciada en 2018. “Me gusta, porque es emocionante terminar algo y terminarlo de una forma fuerte, me parece que es muy fuerte. Al ver de dónde empezamos, hace siete u ocho años, y en dónde estamos ahora es una diferencia como del día a la noche”, señaló. “Sumarme al comienzo y terminar con mi socia de escritura y producción, que ahora está dirigiendo, es una forma maravillosa de terminarlo”.

Afirmó que no es necesario ver las primeras dos películas de Venom para divertirse y disfrutar el nuevo filme, al que calificó como “diversa, malvada y graciosa”.

Para los fans será especialmente atractivo ver a Eddie y Venom interactuar de mejor manera, apoyándose como equipo. Aunque Venom no ha abandonado su gusto por comer cabezas humanas o su forma algo maquiavélica de pensar.

“Tiene un sistema cultural totalmente diferente, pero es muy similar a la dinámica interna de las personalidades muy diferentes que tiene el ser humano... Como dices, tenemos nuestro propio Venom personal”, dijo Hardy. “No creo que sea tu lado bueno o tu lado malo, sino más bien ‘desearía hacer esto, esto es lo que haría si pudiera’ y debes ocultar eso cuando creces, mientras que a Venom se le permite hacer eso”.

Tom Hardy vuelve a ponerse en la piel de Eddie Brock. Y también escribió el guion de la película

La tercera “Venom” cierra el arco en un momento de crisis para el cine superheroico